"¿No nos estaremos equivocando en algo?"
Año tras año, las asignaturas que presentan más dificultades para los alumnos son inglés, matemáticas, y lengua y literatura española. En cuanto al inglés, "es evidente que no se puede enseñar otro idioma en clases de 30 alumnos", explica José Antonio Martínez, portavoz de los directores de institutos de Madrid. Y en cuanto a la lengua y las matemáticas, "es más difícil saber por qué se falla aquí, ya que son las dos asignaturas a las que más horas dedican los estudiantes", dice.
Pero quizá no se trate de dar más horas. "¿No nos estaremos equivocando en algo?", se pregunta Luis Moreno, director del instituto de secundaria María Moliner, de Coslada. Moreno habla de un replanteamiento de qué y cómo se enseña. "Creo que hay una falta de exigencia en los conocimientos", afirma. También explica que hay una carencia de base desde primaria. "Los apoyos llegan en 3º y 4º de secundaria. Demasiado tarde", añade.
Mario López, director del instituto público de secundaria Diego Velázquez, de Torrelodones, comparte estas tesis: "Los retrasos educativos vienen de primaria pero no explotan hasta secundaria". Pero por otro lado, no cree que los problemas de fracaso escolar se puedan focalizar en asignaturas concretas. Es un problema de complicación educativa, es decir, que los docentes tienen que hacer frente "a 10, 12 situaciones de aprendizaje muy diferentes, a las que hay que darles soluciones individuales, tenemos que buscar una oferta educativa muy abierta e imaginativa", afirma. Y no sólo para los chavales que tengan más dificultades, sino también capaz de atender correctamente "a los alumnos más brillantes, con unas exigencias más altas".
Repetir y diversificar
El consejero de Educación, Luis Peral, por su parte, asegura que no se debe bajar los niveles de exigencia y considera, al igual que el director del instituto de Coslada Luis Moreno, que no es bueno evitar que los chavales que lo necesitan, repitan curso. "Los resultados van a mejorar cuando los chavales vuelvan a repetir", afirma Moreno.
Y con el director del instituto de Torrelodones, Mario López, el consejero de Educación comparte la opinión de que "es necesario diversificar la oferta educativa", señala. En este sentido, como ya hecho en repetidas ocasiones, Perla critica duramente que la paralización de LOCE haya frenado una opción "buena", "los programas de iniciación profesional", que ahora empiezan en 4º de ESO. "Hay que dar un año para que los chicos se entusiasmen aprendiendo un oficio y, después, se puede aumentar el contenido académico", asegura.
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