Vivienda cambiará la Ley del Suelo para evitar la especulación

El Gobierno reformará la legislación sobre suelo, señalado como el gran causante de la escalada del precio de la vivienda, para combatir la especulación y abaratar los terrenos. La ministra de Vivienda, María Antonia Trujillo, anunció ayer que las medidas principales consistirán en fijar un precio legal del suelo más acorde con su valor inicial (sin contar la expectativa de revalorización) y sancionar a los propietarios de solares que los retengan con fines especulativos. El Ejecutivo también modificará los incentivos fiscales por compra de piso en la reforma del IRPF de 2005.

Frente al mayor liberalismo del PP, el Gobierno actual prepara una ley del suelo con tintes más intervencionistas para intentar frenar la escalada del precio de la vivienda, que se ha más que duplicado en los últimos seis años. La ministra desgranó los pilares de esta reforma (un compromiso electoral del PSOE) en una comparecencia en la Comisión de Fomento y Vivienda del Congreso.

La principal medida consiste en modificar el criterio para abaratar el precio del suelo, que llega a suponer la mitad del coste final de un piso y que Trujillo quiere pactar con comunidades y ayuntamientos, ya que tienen gran parte de las competencias. La ministra indicó que se tendrá en cuenta el "valor real del suelo y no su valor expectante". Por ejemplo, con esta norma se pretende evitar que se valore una finca rústica a precio de oro sólo porque puede que en el futuro sea urbanizable. Este criterio deberá inspirar a los agentes públicos, pero existen dudas sobre cómo afectará a la iniciativa privada, al menos hasta que se presente al detalle la nueva normativa.

Lo que sí que está claro es que este cambio permitirá al Estado ahorrarse miles de millones en expropiaciones, sobre todo las relacionadas con las grandes infraestructuras, como la alta velocidad ferroviaria. Con la ley actual en la mano, los propietarios de un terreno pueden pedir a ministerios como el de Fomento que les pague una finca rústica a precio de suelo urbanizable.

La nueva ley del suelo también incluirá sanciones para los propietarios que retienen solares sin motivo justificado, bien a través de multas o de penalizaciones fiscales. Trujillo no fue mucho más concreta. Para avanzar en el consenso, la ministra indicó que quiere impulsar un pacto con todas las comunidades para crear una bolsa pública de suelo para viviendas protegidas. En este sentido, la Sociedad Estatal de Promoción y Equipamiento del Suelo, dependiente de Vivienda, dispone ya de seis millones de metros cuadrados para pisos a precios asequibles.

Respecto a la fiscalidad, Trujillo afirmó que el Gobierno modificará la estructura de incentivos fiscales a la compra de vivienda durante el próximo año, en el marco de la reforma del IRPF. La ministra no especificó si se reducirán o ampliarán las actuales desgravaciones, pero insistió en que se debe primar el alquiler.

Críticas y cuenta vivienda

Trujillo recibió críticas del diputado popular Pablo Matos. Sobre el plan de choque para facilitar el acceso a la vivienda aprobado en julio, Matos dijo que "no es más que una campaña de imagen sin contenido alguno".

Las críticas también vinieron de la patronal de los promotores (APCE). Su secretario general, Manuel Martí, dijo en relación a los nuevos criterios de valoración del suelo: "Cada vez que un político fija un precio que no es real, acaba fomentando el mercado negro". El presidente de APCE, Guillermo Chicote, admitió que el sector inmobiliario se está enfriando tras seis años de boom imparable. La presidenta de Banesto, Ana Patricia Botín, coincidió ayer en que este mercado ha comenzado a desacelerarse: de las 700.000 viviendas que se construyeron el año pasado se pasará a 550.000 este año.

Los promotores propusieron que los padres puedan abrir cuentas ahorro vivienda a sus hijos, para que éstos tengan ahorros suficientes para comprar una vivienda cuando se independicen.