La crisis que sufre la industria del calzado se refleja en un desplome exportador del 12%

El calzado atraviesa una fuerte crisis que se refleja claramente en las estadísticas. Si el Índice de Producción Industrial (IPI) cayó en este sector un 13,6% en la primera mitad del año, los datos de exportación no despejan el panorama. En los siete primeros meses de 2004, las exportaciones de calzado cayeron un 11,8%. Las estadísticas de la Dirección Regional de Comercio en Valencia del Ministerio de Industria reflejan que, en conjunto, la exportación creció hasta julio un 4,8% pero la importación lo hizo tres veces más. Esta tendencia hizo que en julio la balanza comercial registrara un déficit de 38,2 millones.

El fuerte repunte de las compras en el exterior hizo que en julio las importaciones crecieran casi seis veces más que las exportaciones. Como consecuencia, el saldo comercial valenciano registró ese mes números rojos, con un déficit comercial de 38,2 millones de euros. La tasa de cobertura fue del 97,1%. El año pasado también se produjo déficit comercial durante dos meses, agosto y septiembre, pero la serie histórica muestra que julio es un mes en el que tradicionalmente el saldo comercial mejora sobre el mes anterior o se mantiene relativamente estable.

Durante los siete primeros meses de este año, las ventas de productos valencianos en el exterior crecieron un 4,8%. Las importaciones lo hicieron un 15,1%, lo que continuó deteriorando la tasa de cobertura acumulada desde principios del año, que se situó en el 106,2%, un punto y medio menor que un mes antes.

Los datos por provincias muestran el bache exportador que sufre Alicante, donde se registró un descenso del 5,9% . En Castellón, la provincia con una tasa de cobertura mayor (163,7%), las exportaciones crecieron un 5,1% pero las importaciones se dispararon un 21,6%. Valencia, finalmente, registró un déficit comercial de 845,6 millones de euros. Las exportaciones en esta provincia repuntaron un 8,9% y un 15,1% las importaciones.

El resumen exportador obedece, nuevamente, a la buena evolución de las ventas de automóviles y motor, pavimentos y revestimientos cerámicos y cítricos. El repunte en las ventas de estos productos en el extranjero compensó con creces los malos datos registrados por los sectores manufactureros. Destacan, entre ellos -porque son el cuarto sector exportador por volumen de importancia y porque registra la tercera mayor caída de ventas- los datos del calzado. Esta industria exportó entre enero y julio un 11,8% menos que en el mismo periodo de 2003. La caída de las ventas fue, además, tres puntos y medio superior a la del conjunto del país. Las importaciones, por el contrario, crecieron un 18,7% hasta julio.

Los datos también muestran que el descenso exportador es mayor con el paso del tiempo, ya que en los siete primeros meses de 2003 sus ventas en el exterior bajaron un 8,8%. Atendiendo exclusivamente a los datos de julio, la caída exportadora es del 10,3%.

Europa es el principal mercado del calzado fabricado en la Comunidad Valenciana y más concretamente Francia, Reino Unido y Alemania son sus principales clientes. Junto con Estados Unidos, estos países absorben más del 60% del calzado que las empresas valencianas venden en el extranjero.

El calzado que importa la Comunidad Valenciana, por el contrario, procede principalmente de China y Vietnam, según un informe sobre el sector del calzado del IVEX (Instituto Valenciano de Exportación).

El sector del calzado es, junto con el textil, el que está sufriendo de forma más visible la competencia de países fabricantes de productos manufactureros con costes bajos. El año pasado ya se cerró con una caída exportadora del 11% y un descenso de trabajadores del 5,2% que dejó en 29.140 la cifra de empleados oficiales del calzado, según cifras de la Federación de Industrias del Calzado (FICE). La situación, en cualquier caso, parece haberse agudizado con el paso de los meses, o al menos se ha hecho más palpable. Este año, de hecho, se ha producido un goteo de cierres de empresas -38 durante los primeros cuatro meses, según datos de un estudio de UGT-PV- y también de despidos. Martínez Valero, una de las firmas de calzado más emblemáticas de Elche, dejó en mayo en la calle a sus 147 trabajadores. Fue el caso más sonado, pero no el único.

El sector del calzado se caracteriza por la fuerte concentración territorial -Alicante y fundamentalmente Elche, Elda y Villena concentran dos terceras partes de esta industria en España- y por el pequeño tamaño de sus empresas. El 50% de las 1.922 empresas de calzado que el IVEX estimaba que en 2003 había en la Comunidad Valenciana tienen menos de nueve trabajadores. Tres de cada diez tiene menos de cinco.