El Portland saca pecho

El Portland se asienta en la cumbre. El conjunto pamplonés presenta ocho nuevas caras para afrontar el futuro, entre ellos a Balic, mejor jugador del mundo. Existen en el balonmano equipos que marcan épocas y señalan sus victorias como muescas en el mango de un cuchillo. El Barcelona dirigido por Valero Rivera o la selección de Suecia, comandada por el mítico Bengt Johansson, son los dos últimos ejemplos de conjuntos insustituibles, aprendidos de memoria por los aficionados y cuyas salas de trofeos brillan como una columna de húsares. Ahora, recién iniciada la Liga y las competiciones internacionales, todas las brújulas de este deporte señalan indefectiblemente a Pamplona como norte del balonmano profesional y a su equipo como uno de los destinados a escribir una leyenda.

'Zupo' Equisoaín: "No somos favoritos, aunque podamos parecerlo"

El Portland San Antonio, ganador el año pasado de la Recopa de Europa, ha renunciado a su papel de equipo revelación o comparsa de los grandes conjuntos europeos y se ha puesto en marcha para consolidar lo que, en teoría, es un bloque único, con los mejores jugadores de Europa y capaz de luchar por todas las competiciones en las que participa. La plantilla navarra se ha renovado con las salidas de veteranos como Kisselev, Jakimovic o Malumbres y la entrada de ocho nuevas caras, lo que ha reducido la media de edad del conjunto en tres años (ahora se sitúa en 28) y ha dado aire fresco a un equipo que se descomponía progresivamente tras siete años en la élite y nueve títulos conquistados. "Tenemos entre manos un nuevo proyecto y, como tal, resulta difícil reunir y coordinar a los jugadores. Sólo hemos dispuesto de nueve días de entrenamiento conjunto a causa de los Juegos Olímpicos, pero los nuevos han venido con muy buena actitud, además de poseer una enorme y contrastada calidad", señala el técnico navarro Zupo Equisoaín.

El principal fichaje de la temporada ha sido, nada menos, que el de Ivano Balic, el central croata elegido mejor jugador del año 2003, mejor jugador de los pasados europeos y campeón de los Juegos Olímpicos de Atenas. Balic, que compartirá posición en la pista con otra bestia del balonmano, Jackson Richardson, es uno de los jugadores más inteligentes y con mayor capacidad creativa del momento, así como un lanzador certero desde todas las distancias. Al croata se suman una caterva de importantes personajes dentro del marco europeo que han aceptado la oferta de los antonianos para lograr una nueva Copa de Europa, objetivo máximo de la temporada a punto de iniciarse, sin olvidar ni la Liga ni la Copa del Rey, obligaciones inexcusables para un equipo que ansía títulos a cualquier precio. "No considero a mi equipo favorito aunque podamos parecerlo".

El Portland va a disputar a tope los cinco títulos en liza y, para ganarlos, nos vamos a enfrentar a rivales durísimos como el Ciudad Real, el Ademar o el Kiel", recalca Equisoaín. Pero los fichajes de pretemporada son motivo suficiente para sacar pecho y mostrar la verdadera dimensión competitiva del equipo.

El veterano Demetrio Lozano ha sido repescado tras tres temporadas en la Bundesliga alemana para cubrir la marcha de Iakimovic en el lateral y dar al equipo frescura en el ataque y talento a la hora de definir de cara al marco rival. También han sido contratados dos de los deportistas más anhelados por el club: el extremo Andorinho, uno de los favoritos del técnico navarro y al que una artimaña económica de su club, el Sporting de Lisboa, le impidió recalar en el Portland hace tres campañas; y el pivote esloveno Zoran Lubej, cuyo compromiso con los antonianos se remonta al año 2002, aunque no se haya podido materializar hasta esta campaña.

Por último, las incorporaciones se cierran con dos internacionales daneses, el portero Kasper Hvidt y el lateral Jorgensen, viejos conocidos de la afición española tras sus pasos por el Ademar y el Altea, respectivamente, y el extremo, procedente del Barcelona, David Carvajal. La última cara nueva de la plantilla es la del canterano Eduardo Gurbindo, en un claro guiño de un conjunto que pese a pasearse por el mercado internacional no se olvida de que el futuro se encuentra en el balonmano base. Las incorporaciones, junto a la vieja guardia, formada por Vladimir Rivero, Mateo Garralda, Juancho Pérez, Ortigosa o Rocas, prometen buen juego y títulos, aunque, desde el club, acostumbrado a la humildad, siempre sea Zupo Equisoaín el encargado de matizar: "Este año será difícil lograr títulos, aunque no descartamos nada, pero el proyecto va para largo y en ese tiempo demostraremos nuestra verdadera valía".