ETA coloca 16 cargas explosivas en una torre de alta tensión en el Pirineo

La organización terrorista ETA colocó hasta 16 cargas explosivas, de pequeña potencia, en una torre de la línea de alta tensión Francia-España que entra desde Bagneres a Bisecas (Huesca). Ocho de los artefactos estallaron sin producir daño. Las 16 bombas estaban colocadas en una de las torres más próximas a la frontera francesa, en un lugar de difícil acceso desde el valle de Bujaruelo, en el Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido (Huesca) y fueron localizadas desde el helicóptero de la Guardia Civil que detectó ayer por la mañana la explosión de parte de la carga.

Sobre las 15.30 se desactivó el dispositivo que se puso en marcha el sábado, cuando ETA avisó al rotativo Berria de la colocación de los artefactos en Bujaruelo y en Behovia (Guipúzcoa). La carga de Behovia fue desactivada el sábado por la Ertzaintza y estaba en una torre de conducción eléctrica. Los técnicos de la policía vasca apuntan a que puede tener la misma composición y la misma cantidad de explosivo que las cuatro que estallaron el pasado día 15 y que apenas provocaron daños .

El Grupo Especial de Desactivación de Explosivos (Gedex) de la Guardia Civil localizaba ayer por la mañana la torre en la que estaban las 16 cargas explosivas. Las avistaron desde el helicóptero y comprobaron que ocho de las cargas habían explotado. El sábado por la tarde se recibió la amenaza. En ese momento, en San Nicolás de Bujaruelo, en su mesón, estaba comiendo el ministro de trabajo, Jesús Caldera, y el número dos del Ministerio de Fomento, Víctor Morlán, acompañados del delegado del Gobierno, Javier Fernández. Éste contaba que se cerró el acceso desde San Nicolás de Bujaruelo a Torla, en la parte en la que la línea de alta tensión va pegada al camino.

Sobre las 18.30 se levantó el dispositivo, una vez que se comprobó que en ese tramo no había nada. "Las algo más de cien personas que estábamos allí pudimos salir, pero el operativo siguió montado hasta hoy [por ayer] en el resto del trazado", relató el delegado del Gobierno. Desde ese momento, operarios de Red Eléctrica y miembros del Gedex establecieron un dispositivo para localizar los artefactos y actuar en caso de que se produjesen daños en la red.

Las ocho explosiones fueron de muy pequeña potencia y no llegaron a registrarse en los sensores de Red Eléctrica. El servicio no llegó a sufrir ninguna oscilación que activara el dispositivo de seguridad y emergencia. El fluido fue interrumpido mientras se desarrollaban las labores de desactivación de las ocho cargas restantes. Ahora se analiza su composición para saber cuándo explotaron esas cargas.