Los fuegos que surgieron del mar

Aplausos a rabiar. Casi media hora de un elegante y sorprendente espectáculo piromusical puso punto y final al Fórum de Barcelona. Un total de 425.000 personas, según fuentes del Ayuntamiento de Barcelona, lo presenciaron desde el mismo recinto y desde las playas de la ciudad. Este año se bajaban dos persianas, la de la Mercè y la del Fórum, y había que hacerlo a lo grande. Y así fue. El piromusical fue una auténtica coreografía de fuego y colores en la que no hubo estridencias, sino un bello ir y venir de la pirotecnia de un lado para otro, en abanico, del centro a los extremos o de éstos hacia el centro, bajo la mirada de una enorme luna que presidió la velada.

Los datos técnicos del piromusical de ayer dan idea de su dimensión. Un total de 16 toneladas de material lanzados desde 99 embarcaciones que se colocaron formando un arco de 2,5 kilómetros frente a la costa de la ciudad. Todo esto, acompañado por una partitura de Jordi Bonet, Francesc Chaparro, Marcel Botella y Cece Gianotti que reproducía, con instrumentos de todo el mundo, sonidos de la naturaleza, como el de hojas, agua o el mar. La pirotecnia la firmaron las empresas Igual y Grup F.

La fiesta del público, que ayer abarrotó el recinto, comenzó incluso antes de acabar la ceremonia oficinal de clausura en el edificio Fórum. Hacia las 21.00 horas se iniciaron dos pasacalles protagonizados por los artistas que hasta un rato antes llenaban a diario la programación del recinto. Encabezados por el pregonero bombero, el más bromista de cuantos han animado el recinto, y las carrozas del pasacalle Sueños de una noche de verano, partieron de los accesos acompañados por acróbatas marroquíes y guineanos, una fanfarria de Rumanía o artistas del Rajastán. Bailaron al son de una divertida mezcla de estilos musicales y procedencias en la que no faltó el Maria caipirinha, de Carlinhos Brown. "Si no logramos que el mundo gire más, por lo menos que lo haga con salero", bramaba el bombero entre mensaje y mensaje de paz. La comitiva llegó hasta la Fotovoltaica acompañada por el público que durante todo el día llenó el recinto.

Parte de este público, porque la mayoría llevaba horas apostándose en el perímetro del recinto o encima de cualquier objeto, como mesas, sillas, bancos o hasta el chiriguinto de las caipiriñas, para no perderse el piromusical. Los primeros en tomar posiciones lo hicieron a las seis de la tarde, cuatro horas antes de su inicio, lo que da cuenta del entusiasmo con el que los visitantes se abalanzaron para ver un espectáculo que seguro no les decepcionó. Bajo la inmensa placa solar actuaron los mexicanos Tigres del Norte. Por una vez, los hermanos Hernández dejaron de lado los narcocorridos que les han hecho famosos y se arrancaron con el Corrido de Monterrey, relevo musical simbólico entre Barcelona y la capital del Estado de Nuevo León, que en 2007 albergará la segunda edición del Fórum.

A la fiesta se sumaron entonces las siete principales colles castelleres catalanas -Barcelona, Sants, Minyons de Terrassa, Vilafranca, Vella y Joves Xiquets de Valls y Xics de Granollers-, que levantaron otras siete torres humanas. De forma simultánea, de la placa descendió La luz del Fórum, que los pequeños anxanetes que coronaron los castells recogieron en un farolillo, mecha simbólica del piromusical que encenderían en unos minutos. Para ello, se embarcaron hasta llegar al rompeolas, desde donde alimentaron la ola de fuego que saltó hasta el primero de los 99 barcos.

Era el inicio, ahora sí, del fin de 141 días de diálogos, espectáculos y actividades en el recinto del Besòs. El emocionante piromusical acabó con unas enormes letras sobre el mar con la leyenda "Forum Monterrey Mexico 2007" y una voz que indicó: "Gracias Barcelona, Felicidades Monterrey. Nos vemos en 2007". El Fórum de Barcelona se disponía a cerrar sus puertas.