EE UU exigirá huellas y fotos a todos sus visitantes

El sistema US-VISIT, que verifica la identidad de las personas que entran en EE UU mediante una impresión electrónica de huellas dactilares y una fotografía digital, afectará a todos los visitantes a partir del próximo jueves, 30 de septiembre. Hasta ahora, este registro de datos se aplicaba a los viajeros con visado, no a los turistas procedentes de países, como España, que tienen acuerdos de exención de visados.

Además, a partir del 26 de octubre, todos los pasaportes utilizados para entrar en Estados Unidos tendrán que llevar incorporado un procedimiento de lectura óptica. El 5 de enero de este año entró en vigor la obligación de las huellas y la foto para los titulares de visados, dentro del refuerzo de las medidas de seguridad adoptadas por el Congreso tras los atentados del 11-S en Nueva York y Washington.

Ahora esa exigencia se amplía: los ciudadanos de los 27 países acogidos al Programa de Exención de Visados, entre ellos España, seguirán pudiendo visitar EE UU como turistas sin nuevos requisitos, siempre que su estancia sea inferior a tres meses (hay unos 13 millones de personas cada año en esa situación), pero también tendrán que pasar el índice de cada mano por un lector óptico de huellas dactilares y su imagen será captada por una cámara digital.

El tiempo empleado en la operación es de unos 15 segundos "en la mayoría de los casos", según el Departamento de Seguridad Nacional. Tras la recogida de datos, los aduaneros examinan los pasaportes y hacen preguntas sobre el destino del visitante y el propósito de su estancia. Seguridad Nacional afirma que "todos los datos obtenidos se almacenan de forma segura como parte del historial del viaje. Sólo tienen acceso a esta información funcionarios autorizados y ciertos organismos cuya responsabilidad es garantizar la seguridad de los estadounidenses y de los visitantes extranjeros".

Críticas

En un esfuerzo por endulzar una operación que ha recibido numerosísimas críticas, tanto por la violación de la intimidad que supone como por su relativa eficacia, las autoridades dicen que "la identificación biométrica protege además a nuestros visitantes, haciendo virtualmente imposible que nadie suplante la identidad del titular de los documentos en caso de robo de documentos".

US-VISIT, que ya se aplicaba en los últimos meses aleatoriamente a turistas sin visado, funciona en 115 aeropuertos y 14 puertos de Estados Unidos. Con fecha de 31 de diciembre, se extenderá a todos los aeropuertos de entrada en EE UU (165) y a los 50 puertos más utilizados.

Desde el 26 de octubre, las aduanas estadounidenses exigirán además que los pasaportes de los ciudadanos acogidos al Programa de Exención de Visados puedan leerse electrónicamente, una medida prevista para hace un año, pero que se aplazó hasta ahora para los 21 países que lo solicitaron, porque en los demás es obligatorio el uso de esos pasaportes.

El mandato del Congreso para reforzar los controles de seguridad no incluye la exigencia de pasaportes que lleven incorporados los datos biométricos del titular. Sin embargo, Seguridad Nacional los exige, aunque se aplaza la fecha al 26 de octubre de 2005 "para evitar las posibles perturbaciones de los viajeros y proporcionar a la comunidad internacional un margen de tiempo adecuado para poner en circulación pasaportes más seguros, como son los biométricos".

El Departamento de Estado cree que a finales de 2005 todos los pasaportes de ciudadanos estadounidenses serán biométricos.