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Cosmocaixa comienza su andadura con el objetivo de atraer a un público amplio y diverso

El Rey inauguró ayer en Barcelona el reformado Museo de la Ciencia de La Caixa

Está pensado para todos los públicos, de todas las edades y de todos los niveles educativos. Cosmocaixa, el reformado Museo de la Ciencia de la Fundación La Caixa, comenzó ayer su andadura con una inauguración oficial que estuvo presidida por el rey Juan Carlos, acompañado de la infanta Cristina, y a la que asistieron las máximas autoridades políticas de Cataluña y la ministra de Cultura, Carmen Calvo. Durante el acto, el presidente de La Caixa, Ricard Fornesa, indicó que el museo "responde a un sueño de categoría y a una ambición de gran envergadura".

"Creo que las comunidades acaban dejando una impronta en el curso de su historia si tienen sueños grandes, si los aplican con la ambición adecuada, si los lanzan con la fuerza conveniente e incorporando las iniciativas que sean necesarias, y siempre llegando a la realidad de su implantación y materialización definitiva", señaló Fornesa, que recordó que el centro "está dirigido especialmente a la juventud", aunque su objetivo es alcanzar a todo tipo de públicos. El reformado Museo de la Ciencia que ayer se inauguró -con un cambio de nombre debido a que la entidad quería dejar claro que el centro era de su titularidad- es ciertamente ambicioso. Ocupa 50.000 metros cuadrados, ha costado más de 100 millones de euros, y sus fondos incorporan desde el fragmento de un bosque amazónico inundado a grandes cortes geológicos, pasando por una colección de cerebros, fósiles, hormigas y, en fin, una cantidad tal de piezas originales y módulos interactivos que se precisan muchas horas para conocer a fondo su contenido.

Al acto inaugural asistieron unas quinientas personas. Además de don Juan Carlos y la infanta Cristina, se encontraban también la ministra de Cultura, Carmen Calvo; el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall; el presidente del Parlament, Ernest Benach; el alcalde de Barcelona, Joan Clos; el presidente de la Diputación de Barcelona, Celestino Corbacho; el delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, y numerosos consejeros del Gobierno de la Generalitat, entre otras autoridades.

El acto en sí consistió en un breve discurso de Fornesa tras el cual don Juan Carlos accionó la palanca que ponía en marcha el mecanismo de una escultura con estructura de clepsidra diseñada por Reyes Abade que está situada frente a la vieja entrada del museo, por la Ronda de Dalt. Según señaló al finalizar el recorrido Jorge Wagensberg, director de Cosmocaixa, el Rey se interesó por el bosque amazónico, se detuvo en un módulo sobre la incertidumbre realizado con arena y mostró su fascinación por las reproducciones de homínidos.

Tras la visita, Maragall destacó el interés del edificio del museo, obra de los arquitectos Robert y Esteve Terrades, y también el apartado destinado a explicar los experimentos de física. Por su parte, Joan Clos consideró que el museo "es una gran conquista de la ciudad, que tiene así un museo de ciencia de primer nivel, lo que era una de sus lagunas".

Cosmocaixa abrirá sus puertas al público el próximo sábado con una fiesta popular que comenzará a las 21.00 horas. El domingo, la jornada de inauguración estará amenizada con espectáculos. La entrada será gratuita hasta el 9 de enero.

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