"Ahora mismo tengo un 0% de audiencia"

El reto no es menor. Karlos Arguiñano compite contra sí mismo. Desde el 6 de septiembre, Tele 5 estrena nuevas recetas del cocinero vasco, mientras Televisión Española repite las que ya emitió las dos pasadas temporadas. Para la cadena pública no puede resultar más rentable: 24,2% de cuota de pantalla, frente al 22,5% de la competencia. Y así pueden seguir las cosas hasta, probablemente, noviembre, cuando aterrice en las mañanas de La Primera José Andrés (Mieres, 1969), el cocinero español que sorprende a los paladares más exigentes del Capitolio desde su pequeño emporio de restaurantes en la capital de Estados Unidos. Se enamoró del país en una escala del buque-escuela Juan Sebastián Elcano, a bordo del que hizo la mili, y allí se instaló cuando dio por terminada su colaboración con Ferran Adrià. "Me apasiona explicar la vida a través de la cocina y la gastronomía", confiesa. José Andrés no siente la presión sobre sus fogones. Reconoce su punto de partida: "Ahora mismo tengo un 0% de audiencia".

Pregunta. Asegura que más que de cocina se propone hacer un programa de gastronomía. ¿Cuál es el matiz?

Respuesta. La gastronomía está basada en un recetario popular, y el cocinero debe saber compartir los secretos y técnicas culinarias. Seré muy didáctico, saldremos al mercado, visitaremos bodegas, o una fábrica de salazones para ver cómo se elabora una anchoa, seguiremos el proceso del queso de cabrales... El programa será algo más que enseñar una receta.

P. Creció en los fogones de Ferran Adrià. En Washington practica la cocina creativa. ¿Los espectadores van a poder seguirle el paso?

R. Claro que sí. En nuestro recetario tradicional popular no hay nada que no esté al alcance de todo el mundo. Y probablemente hay aspectos en los que el ama de casa tiene mucho que enseñarme. La magia de unas buenas angulas es genial, pero la de un buen potaje con un poco de tocino es igual de genial. Y el programa irá creciendo; ya veremos adónde nos lleva.

P. Desde hace dos semanas, para Arguiñano es prácticamente el 50% de la audiencia de mediodía. ¿Qué ingredientes propone para llevarse una porción de la tarta de la audiencia?

R. Ahora mismo tengo un 0%. De ahí para arriba, creo que TVE estará contenta (risas). Si mi único trabajo en el mundo fuera un programa de cocina, me preocuparía mucho más la audiencia. Pero lo que me da de comer es el restaurante, y esto lo hago con la ilusión de sentirme satisfecho.

P. Para ser la primera vez que se coloca frente a la cámara, ¿contará con alguna compañía en el plató?

R. Queremos tener de vez en cuando invitados, que pueden ser caras muy conocidas -El Gran Wyoming va a estar la primera semana-, un señor de una sociedad gastronómica, un ama de casa... Y el resto del programa se irá escribiendo.