La crisis de la empresa coloca al PSE en el punto de mira de todos los partidos

La crisis del astillero de Sestao puede enturbiar el acto de proclamación de Patxi López como candidato a lehendakari del PSE-EE, que se celebra el domingo en Bilbao con la presencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero. Los sindicatos de La Naval van a ir a protestar al palacio Euskalduna y los demás partidos han aprovechado el problema para colocar al PSE en el punto de mira. Al debate se sumó ayer el lehendakari Ibarretxe, quien aseguró en Oñati que las instituciones vascas estarán detrás del Gobierno central para salvar el astillero, pero que de lo contrario las tendrá enfrente. No precisó, sin embargo, si la Administración autónoma está dispuesta a entrar en una eventual empresa mixta (privada-pública) con aportación de capital.

Replicando a las críticas, el secretario general del PSE-EE, Patxi López, afirmó ayer en Radio Euskadi que La Naval es la primera preocupación en estos momentos de su partido y que le "parece vital garantizar el futuro del astillero en la Margen Izquierda". López, que culpó de la situación a la gestión del anterior Gobierno del PP, indicó que la segregación y privatización de Izar "es la única formula que la UE permite en estos momentos". Añadió que está presionando en el partido y en la SEPI para mantener el astillero y pidió al Gobierno vasco que se implique "de verdad" en su futuro.

El portavoz de Industria del PP en el Parlamento vasco, Fernando Maura, también terció en el debate criticando la "dejación" que el PSOE está haciendo del sector naval y le acusó de abandonar "el objetivo principal" de que La Naval se mantenga "en las mismas condiciones con las que opera". Asimismo consideró "improbable" que el Gobierno vasco participe en la fórmula de privatización propuesta por la SEPI. Maura y el presidente del PP en Vizcaya, Leopoldo Barreda, se reunieron en Barakaldo con los portavoces populares en los municipios de la Margen Izquierda y Zona Minera.