Matt Damon repite en su papel de amnésico y despiadado agente Bourne

Asesino con amnesia, policía corrupto o buen chico, Matt Damon (Cambridge, Massachusetts, 1970) está dispuesto a meterse en la piel de esos personajes y hacer películas con los directores que le gustan o los proyectos que le interesan. Ayer presentó en Madrid El mito de Bourne, de Paul Greengrass, una secuela que en tan sólo siete semanas ha recaudado en Estados Unidos cerca de 150 millones de euros, por encima de Collateral, de Tom Cruise. "Yo soy dos veces más estrella que él", apuntó Damon sonriendo. En junio rodará junto a Leonardo DiCaprio La huida, de Scorsese.

El actor estadounidense, uno de los más cotizados en estos momentos en Hollywood, declaró ante un reducido grupo de periodistas en Madrid que este año se ha vendido a las secuelas cinematográficas. "Acabo de terminar Ocean's Twelve, de Steven Soderbergh, junto a Julia Roberts, George Clooney y Brad Pitt, entre otros. Y en El mito de Bourne interpreto de nuevo al agente especial Jason Bourne". Damon aceptó rodar este filme, que se estrena en España el 17 de septiembre, por el director Paul Greengrass, autor, entre otras filmes, de Domingo sangriento.

La película continúa la lucha por recuperar la memoria de un agente especial entrenado por el Gobierno, iniciada en El caso Bourne, para lo que tuvo que enfrentarse a algunas extrañas y siniestras figuras de su pasado. Pero ese pasado, y su relación con el mundo del espionaje y la CIA, le persigue. Producida por Frank Marshall y protagonizada por Franka Potente, Brian Cox y Julia Stiles, El mito de Bourne incorpora a su reparto a Joan Allen y Karl Urban, y "profundiza en la mente" de este experto agente y asesino, que "aunque está reformado, sigue buscando respuestas a muchos interrogantes que le quedan por contestar".

Damon, que vivió y sufrió de cerca el 11-S en Nueva York, no tiene reparos en manifestar sus afinidades políticas. Apuesta por el candidato demócrata y está pidiendo el voto para John Kerry en las elecciones presidenciales de Estados Unidos que se celebrarán el próximo noviembre. Rodó con Doug Liman, responsable de la primera parte de El caso Bourne, un anuncio en el que se muestra a varios ciudadanos que han perdido el empleo mientras él dice: "George Bush: es su trabajo o el nuestro", llamando a la participación ciudadana. "Cuantos más votos haya en las urnas más favorece al candidato demócrata. Sé que fuera de mi país preocupa mucho la política exterior de George Bush, pero a mí me preocupa más la interna, sobre todo la laboral y la educativa, que no funcionan. En el tiempo que lleva Bush se han perdido un millón de puestos de trabajo y eso es grave. No creo que apoyar al partido demócrata perjudique mi carrera, pero hay que tener mucho cuidado con los republicanos, porque saben muy bien vilipendiar a todos aquellos que no lo son. A pesar de todo, defiendo las ideas en las que creo y por ello no estoy dispuesto a cerrar la boca".

Entre los proyectos inmediatos de Damon destacan el rodaje de Syriana, de Stephen Gaghan, un filme muy similar a Traffic pero sobre el mundo del petróleo; The Informent, de Steven Soderbergh, y La huida, de Martin Scorsese, en la que interpreta a un policía al servicio de la mafia, mientras que Leonardo DiCaprio es un policía infiltrado en la mafia. Esta última película comenzará a rodarse en junio del próximo año.