Un mar de dudas

Los mercados de valores se permitieron en esta última sesión una discreta reacción, gracias a la menor presión que registraba el mercado del petróleo. No obstante, la subida de las cotizaciones se ha producido en medio de un ambiente apagado que ha frenado la actividad.

Los inversores mantienen las dudas sobre la capacidad real de recuperación de las bolsas cuando todavía es una incógnita la repercusión de los actuales precios del petróleo sobre las economías. El resultado ha sido una vez más un negocio escaso y muy concentrado en los grandes valores, entre los que, en el mercado español, destacaron los bancarios, por contratación y por sus avances.

En el mercado continuo se negociaron 977,88 millones de euros, pero las operaciones "abiertas" tan sólo sumaron 803,64 millones de euros, una de las cifras más bajas del ejercicio.

Los avances de los grandes valores permitieron al Ibex 35 acercarse al nivel de los 7.800 puntos, que incluso se llegaron a superar en algunos momentos. Este índice subió al cierre el 1,06%, mientras que el índice general de la Bolsa de Madrid ganó el 0,97%, para situarse en 824,24.

Los otros mercados de la eurozona se mostraron más firmes en su capacidad de reacción y sus ganancias fueron mayores, destacando la Bolsa de Francfort, con un avance del 1,60%. París subió el 1,46%, mientras que la Bolsa de Londres ofreció un avance del 0,83%.

En Estados Unidos empiezan a crecer las dudas sobre la recuperación económica y los inversores ya empiezan a dividir su atención entre el mercado del petróleo y los pronósticos sobre la revisión del PIB del segundo trimestre, que se publicará el próximo viernes.

Mientras que el precio del petróleo parecía estancarse, la situación en Irak consigue mantener en vilo a medio mundo, lo que provocaba una serie de pequeños altibajos en la Bolsa de Nueva York que frenaron las ganancias en los mercados europeos. El índice Dow Jones de valores industriales cerró con una pérdida del 0,37% y el Nasdaq ganó un 0,4%.