Ibarretxe asegura que su plan soberanista abre "la posibilidad de conseguir la paz"

El lehendakari, Juan José Ibarretxe, criticó ayer "el miedo a la democracia" de quienes se oponen a la consulta popular sobre su plan soberanista para Euskadi. Ibarretxe dijo que su propuesta de nuevo Estatuto para el País Vasco constituye "la posibilidad de conseguir la paz y un acuerdo de normalización política en términos de respeto mutuo" en un futuro inmediato. No quiso, sin embargo, adelantar su posición sobre la Conferencia de Presidentes que José Luis Rodríguez Zapatero quiere crear en otoño para abordar la política autonómica.

Juan José Ibarretxe habló ayer en Bilbao de los "momentos políticos trascendentales y apasionantes" que va a vivir el País Vasco en el próximo periodo parlamentario. El debate de su propuesta de nuevo Estatuto en el Parlamento vasco supondrá, en su opinión, la posibilidad de conseguir un acuerdo de normalización política, "la mayor necesidad de la democracia vasca".

El lehendakari dijo que nadie debe tener miedo a un pronunciamiento democrático de la sociedad vasca. "Yo no puedo entender por qué desde Batasuna, el Partido Popular o el Partido Socialista se tiene miedo a que la sociedad vasca se pronuncie acerca de cómo queremos construir nuestro futuro", añadió. "Estoy convencido de que si algo no seremos los vascos es lo que no queramos".

Juan José Ibarretxe reiteró que su intención de someter el proyecto de reforma estatutaria a consulta en el País Vasco sólo se hará en ausencia de violencia. "Es una consideración puesta a ciencia y conciencia cuando presenté la propuesta", afirmó. "Es la única manera en la que la sociedad vasca puede posicionarse a través de una consulta popular y, en su caso, establecer un modelo de sociedad diferente", añadió el presidente del Gobierno vasco.

El cuestionario de Zapatero

Ibarretxe rechazó contestar a preguntas sobre el cuestionario remitido a las 17 comunidades autónomas por el presidente del Gobierno central, José Luis Rodríguez Zapatero, para establecer los objetivos de la Conferencia de Presidentes, el foro de máximos responsables de los Ejecutivos regionales cuya inauguración está prevista para noviembre.

El nuevo organismo, una promesa electoral de los socialistas, será el marco para canalizar las relaciones de las Administraciones autonómicas entre sí y de éstas con el Gobierno central. "Queremos saber lo que se quiere hacer antes de tomar decisiones", explicó. "No es un debate para hacer en los medios de comunicación".

El presidente vasco instó a los socialistas a reflexionar sobre las diferencias al abordar las reformas estatutarias en Cataluña y en el País Vasco. El lehendakari preguntó directamente a Zapatero por qué es favorable a aceptar la decisión que tome el Parlamento de Cataluña y no muestra la misma voluntad respecto a lo que vaya a decir al Parlamento vasco sobre el plan Ibarretxe. "Por las mismas razones debe aceptarse lo que vaya a decidir el Parlamento vasco", defendió.

Cadena de atentados

Ibarretxe condenó la cadena de atentados de la organización terrorista ETA en localidades de la costa cantábrica en las últimas semanas. "ETA sobra y estorba", dijo el lehendakari. "Está siendo sorda y ciega ante las exigencias de la sociedad vasca. Hace mucho tiempo que exigimos a ETA que desaparezca, queremos trabajar, desarrollar nuestra actividad en la política, en la economía en paz, en libertad, y en democracia".

El lehendakari repitió que la banda no escucha las exigencias de la sociedad vasca. "ETA habla de sociedad vasca, de democracia vasca, pero no admite lo que le exige la inmensa mayoría de la sociedad vasca y también la inmensa mayoría del mundo de Batasuna".

Por otra parte, el dirigente de la ilegalizada Batasuna, Arnaldo Otegi, dijo en Pamplona que percibe "una nueva oportunidad para iniciar la resolución del conflicto vasco", derivada del debate abierto en torno al modelo de Estado que marca la Constitución y a la cada vez más favorable postura de la población, a su juicio, a una consulta popular. Otegi añadió que "es posible compartir un espacio común democrático entre todos para resolver el conflicto político" en el País Vasco.