Equitación en el paraíso

La empresa privada Club Hípico Pasodoble organiza desde hace 20 años paseos a caballo en Huelva. El propietario de esta empresa, Manuel Muriel, considera un privilegio pasar junto al mar y por el entorno de Doñana.

Una de las rutas a caballo del Club Hípico Pasodoble pasa por el Parque Dunar en dirección al Parque Nacional de Doñana, la Duna del Asperillo -con bajada a la playa en dirección a Mazagón- y el Parque Natural de regreso a Matalascañas. En total, dos horas de recorrido por uno de los tramos que encierra mayor belleza paisajística y valor ecológico.

La de la Duna del Asperillo es un montículo de arena de 200 metros de altura. En ese punto parecen concentrarse todos los estados naturales de Doñana: a la derecha se extiende una frondosa masa arbórea compuesta de pinos, enebros y sabinas y a la izquierda centellea el inmenso mar azul de Doñana con su amplia arena dorada.

Además, el recorrido atraviesa zonas por las que sólo se permite el tránsito a peatones o jinetes con la autorización del Parque Natural y del Gobierno andaluz, permiso que posee esta empresa. Ése es el caso del tramo comprendido entre la Duna del Asperillo y Matadifunto, un antiguo cuartel de la Guardia Civil ya en ruinas.

Las rutas se realizan siempre en grupo de 18 personas. Además, tres monitores supervisan el recorrido para evitar que se produzcan incidentes. No es necesaria experiencia. "Los caballos son muy mansos. Si no tuviéramos esa garantía sería imposible realizar esta actividad. Este animal es muy inteligente e inmediatamente conoce si eres inexperto o no", explica Manuel Muriel mientras organiza en el recinto del picadero, ubicado en el Parque Dunar, a los caballistas. Éste es el tercer año que la empresa desarrolla la actividad en esta zona, sobre los terrenos municipales del Parque Dunar.

"Al principio hay que transmitir serenidad a los clientes, sobre todo si son inexpertos", indica Manuel Muriel, al tiempo que da las primeras instrucciones para guiar al caballo: "Las riendas se cogen cortas y juntas. Un pequeño tirón para atrás, significa parar. Las dos hacia la izquierda para girar a la izquierda y las dos a la derecha para la ir hacia la derecha. No hay que tener miedo al caballo, sólo hay que comunicarse con él". Y la comitiva, ordenada en fila india, emprende el camino en dirección a Doñana.

"Repetiré sin duda porque la experiencia ha sido maravillosa. Este paisaje es de sueño, precioso", expresó Manuel Ríos, un sevillano de 37 años que montó a caballo con su hija, Reyes Rincón, de 12. "Le he dicho a mi padre que me compre un caballo. Me he divertido mucho", afirmó ésta.

Antonio Fernández, de 37 años, también sevillano, manifestó: " Ha sido una sensación de libertad inexplicable, en plena naturaleza. Salvaje. Es para vivirlo. Me ha encantado el ruido de los cascos al romper con las olas", señaló. Y su amigo, Ramiro González, de 36: "Es un paisaje muy completo: las dunas, la naturaleza, los pinos y el mar. A la vuelta, con el sol del crepúsculo y el único sonido de los caballos, es como si regresáramos del paraíso", dijo.

- Datos: Club Hípico Paso Doble. Lugar: Parque Dunar, s/n. Matalascañas (Huelva). 959 44 82 41. Precio: 22 euros. Duración del recorrido: 2 horas.