De punta a punta
Madrid
Durante las noches de verano en Madrid el metro parece más cosmopolita que nunca. Los inmigrantes van y vienen de un barrio a otro visitando a parientes y amigos. Es la temporada del año en que tienen tiempo para verse, para charlar tranquilamente en el banco de una plaza o una terraza, para conocer nuevos restaurantes de compatriotas. "No tengo dinero para salir fuera de Madrid", explica un camarero procedente de Santo Domingo, "pero acá me lo paso mejor que allá en mi tierra por el verano. Allá siempre veía a la misma gente. Ahora voy de un barrio a otro en el metro, me recorro la ciudad, un día veo a un amigo, otro día conozco a alguien nuevo... la ciudad está muy bien en verano. Lo único malo es el calor. Pero también se acostumbra uno".
"Muchos venimos pensando en volvernos", explica Vladimir, un camarero boliviano. "Pero cuando te das cuenta te has acostumbrado demasiado a esta tierra".