Baluarte invertirá 200.000 euros en la obra para hacer transitable su plaza pública

Apenas diez meses después de su inauguración, la sociedad Baluarte se va a ver obligada a invertir 200.000 euros en hacer transitable la inmensa plaza de 10.500 metros cuadrados que custodia el Auditorio-Palacio de Congresos de Navarra, en Pamplona, una obra sufragada por las instituciones públicas de la región y cuyo presupuesto ascendió a 78,1 millones de euros.

El mayor exponente cultural de la Comunidad foral, inaugurado el 30 de octubre de 2003, trajo aparejada la creación de una gran plaza pública en el centro de Pamplona que ha permanecido casi siempre vacía. Los mayores culpables de esa desocupación han sido los incómodos 800.000 adoquines de piedra extraídos de una cantera de Portugal que el creador de la infraestructura, el arquitecto Patxi Mangado, colocó como pavimento.

Ya en noviembre los primeros peatones que se acercaron a la plaza se quejaron por la dificultad de deambular por ella y advirtieron de que el tipo de adoquín elegido hacía inviable el paso de personas con minusvalías físicas y en sillas de ruedas, el ocio de los niños más pequeños y de las personas mayores o el simple caminar con zapatos de tacón a través de un gran espacio ofrecido a la ciudad por el arquitecto, pero cuyo diseño impedía precisamente ese disfrute.

De hecho, el Ayuntamiento de Pamplona, que el pasado 5 de agosto concedió la licencia a Baluarte para reformar la plaza, no firmó la recepción oficial de las obras al considerar que no estarían acabadas hasta que no se mejorase la peatonalización de este espacio. El consistorio, no obstante, había dado previamente el visto bueno al diseño de la plaza.

Ahora, la sociedad Baluarte, que se cofinancia con el patrocinio de corporaciones empresariales privadas, se hará cargo del presupuesto de reforma de unas obras, que deben estar concluidas en tres meses, mediante un circuito de corredores que mejora la accesibilidad y que ha sido diseñado por el propio Patxi Mangado.

En Navarra hay 22.547 personas con problemas de movilidad físico-motórica y neurológica, según la memoria presentada este mes por el Gobierno foral. En otras palabras, uno de cada diez hogares navarros conoce de cerca los problemas de accesibilidad inherentes a esas minusvalías. El 49% de los afectados ha denunciado tener problemas de acceso a espectáculos de ocio y cultura. Baluarte se inauguró el pasado año, que fue Año Europeo de las Personas con Discapacidad.

El Ayuntamiento de Estella, localidad natal de Mangado, tuvo años atrás que reformar parcialmente una pequeña plaza local diseñada por el arquitecto con el similar objetivo de mejorar la seguridad y el tránsito de peatones y vecinos.