"En Vitoria la gente es más abierta que en Barcelona"
El nuevo vicerrector del campus de Álava de la UPV, Joan Sallés (Barcelona 1960), es, desde hace ocho años, un vitoriano de adopción que no tiene intención de volver a su tierra. "Es cierto que nunca pensé que iba a regresar a Cataluña y, menos, después de haber conocido a mi novia, de Vitoria de toda la vida", comenta quien es también profesor titular de Farmacología.
Pregunta. ¿Conoce las fiestas de La Blanca?
Respuesta. Por supuesto. En estos ocho años, habré fallado dos años, por circunstancias familiares. Eso sí, nunca antes de mi llegada a la ciudad había estado en Vitoria ni conocía nada sobre sus fiestas.
P. ¿Qué le pareció la bajada del Celedón?
R. Impresionante. Y lo que es más relevante: todos mis amigos catalanes se han llevado una sorpresa muy agradable, por la ciudad y sus ciudadanos. Cualquier vitoriano que vaya a vivir a Barcelona se encontraría con más problemas, incluso de trato personal. Aquí la gente es mucho más abierta.
P. Aparte de la bajada del Celedón, ¿a qué actos acude?
R. A los conciertos de la plaza de los Fueros. No participo de las actividades de las mañanas, aunque he hecho esfuerzos por acudir al Rosario de la Aurora, pero las circunstancias me han impedido llegar a la cita. Y por las tardes, tampoco he participado mucho: no me gustan los toros.
P. ¿Qué es lo que más le llama la atención de estos días?
R. El ambiente en la calle, caracterizado por la tranquilidad. Nunca hay sensación de inseguridad, de mal rollo. Incluso a altas horas de la madrugada, cuando la gente lleva una copa de más.
P. Desde hace unos años, las txoznas se han ubicado en el recinto universitario. ¿Qué le parece?
R. Es nuestra colaboración con la ciudad, contrapartida mínima a la ayuda que el Ayuntamiento y la Diputación han prestado al campus de Álava.
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