El número de adopciones crece el 51% en Cataluña en 6 meses

Las adopciones en Cataluña han aumentado el 51% durante el primer semestre del año en relación con el mismo periodo de 2003, pasando de 543 a 824. Si este ritmo se mantiene, cuando acabe el año los catalanes habrán adoptado más de 1.600 niños, frente a 1.121 en 2003. Estas cifras, presentadas ayer por la consejera de Bienestar, Anna Simó, convierten a Cataluña en uno de los países con mayor tasa de adopciones del mundo. La Generalitat estudia medidas para rebajar el coste de la adopción internacional.

El número de adopciones en Cataluña de enero a junio ha crecido por primera vez en los últimos tres años. Con 0,16 niños adoptados por cada 1.000 habitantes, Cataluña dobla el promedio español (0,07) y sobrepasa a Suecia, Dinamarca, Francia e Italia.

En el caso de la adopción nacional, el incremento es significativo si se tiene en cuenta que del total de los niños adoptados este año, 71 eran de Cataluña, una cifra que casi iguala a la del año 2003.

La directora del Instituto Catalán para el Acogimiento y la Adopción (ICAA), Rosa Bertran, explicó ayer que este fenómeno se debe en parte a cambios sociológicos que propician que más niños abandonados puedan ser adoptados y también citó el incremento de la inmigración.

El número de solicitudes sigue una proyección parecida. Según la consejera, si la cifra de peticiones continúa aumentando como hasta junio, para finales de año podrán alcanzar las 3.800, frente a 3.224 en 2003 y 2.291 en 2002. Simó explicó que para hacer frente al incremento de demandas de adopción se prevé ampliar el número de equipos (actualmente son ocho) que se encargan de evaluar a las familias, así como agilizar los trámites de la adopción. "Desde enero de este año, las reuniones valorativas con las familias se hacen cada semana en lugar de cada dos", dijo.

Sin embargo, según la consejera la legislación "biologista" es el principal obstáculo para que el proceso sea más rápido. "En lugar de primar el derecho del menor, prima el derecho de la familia biológica", aseguró Simó, quien adelantó que se está estudiando fijar un límite de tiempo en el que la familia biológica tenga derechos sobre el menor. "No se puede esperar eternamente a que una familia se normalice", añadió.

Además, la Generalitat estudia medidas para ayudar económicamente en las adopciones internacionales, asumiendo el coste parcial o total del certificado de idoneidad y del estudio psicológico de los padres, que actualmente cuesta 900 euros.

Este año, de las 753 adopciones internacionales, en 332 casos el menor procedía de China y en 242 de Rusia, seguidas de lejos por Etiopía, con 37, y Ucrania, con 30. Según Bertran, el hecho de que China haya sobrepasado a Rusia este año se debe a que se ha liberado la cuota de adopciones en ese país.

Uno de los objetivos principales es precisamente establecer contactos con los países donde se adopta para facilitar el proceso, según Simó. "Tenemos la voluntad de ser una organización abierta a nuevas vías de adopción más seguras". Actualmente se están estableciendo contactos con Vietnam, Kenia, Tailandia y Camboya.

Bertran aseguró el ICAA envía regularmente delegaciones a los países de origen para conocer su realidad política y establecer canales de adopción más seguros.Según Bertran, el perfil de los adoptantes ha cambiado en los útlimos años. El 60% de los solicitantes tienen entre 36 y 45 años, y ha disminuido considerablmente el número de personas que sobrepasan esa edad. En cuanto al estado civil de los solicitantes, el 84% son matrimonios, seguidos por familias monoparentales (el 13%) y parejas de hecho (el 3%). Bertran destacó que la cifra de personas que viven solas e inician los trámites de adopción es un fenómeno en crecimiento. "Para finales de año seguramente veremos un aumento significativo", apuntó. El 92% de estas personas son mujeres.

De los matrimonios que deciden adoptar, el 60% no tienen hijos. En los últimos años, sin embargo, se ha producido un incremento -del 10% en 2000 y del 18% en 2002- del número de matrimonios que, habiendo adoptado antes, quieren hacerlo otra vez.