Entre las dudas y la satisfacción

Satisfacción moderada en las filas del Gobierno catalán y dudas entre la oposición por la "dudosa fiabilidad" de la encuesta. El portavoz del Gobierno catalán, Joaquim Nadal, realizó ayer una evaluación "positiva, prudente y con mucha cautela" de los resultados del sondeo y destacó el hecho de que poco más del 10% de los encuestados suspenden al Gobierno de Pasqual Maragall. El consejero de Economía y Finanzas, Antoni Castells, también fue cauto y evitó "caer en la autocomplacencia", aunque se mostró "satisfecho" con el resultado.

En opinión de Marina Llansana, portavoz de ERC, el sondeo "avala" la gestión de las áreas del Ejecutivo que dependen de su partido -el uso del catalán y el fomento del comercio y el turismo-, y el portavoz parlamentario de ICV-EUiA, Joan Boada, el tercer partido que forma parte del Gobierno, afirmó que el tripartito "progresa adecuadamente".

Entre los bancos de la oposición en el Parlament aparecieron las críticas y el escepticismo por el alcance de la muestra. El portavoz de CiU, Felip Puig, expresó sus dudas sobre el sondeo por la "clara voluntad de manipulación, control e intervención de los medios públicos" que, en su opinión, tiene el Ejecutivo presidido por Maragall. "Este Gobierno controla todos los resortes y también puede haber tenido la tentación de orientar el contenido de la encuesta, de intervenir, manipular y controlarla", subrayó. Puig, además, explicó que el Gobierno "no da respuesta a las prioridades de los ciudadanos, como ocurre con las políticas relativas a vivienda y energía", dos de las cuestiones menos valoradas por los encuestados.

El presidente del PP catalán, Josep Piqué, puso en duda la fiabilidad del estudio. "Parece que sólo se ha consultado a los ciudadanos que ven TV-3, leen determinados medios de comunicación y votan a partidos de izquierda", dijo. Aun así, Piqué destacó que los catalanes ponen de relieve en el sondeo "elementos críticos" a la gestión del Gobierno catalán. "La mayoría considera que el país está igual y que la situación económica ha empeorado", según el líder del PP catalán.