La firma de lujo italiana Bulgari desembarca en el paseo de Gràcia

Las principales marcas de lujo internacionales siguen con la mirada fija en el paseo de Gràcia. La firma italiana Bulgari ha elegido la denominada milla de oro para su desembarco en Barcelona "a finales de año", según fuentes de la compañía. Bulgari dispone actualmente de tiendas en Madrid -en la calle de Serrano, el equivalente madrileño del paseo de Gràcia- y Marbella. La cadena ha desarrollado en los últimos años shopping centres en varios centros de El Corte Inglés, en Barcelona, Madrid y Valencia.

Bulgari se instalará en un local de 112 metros cuadrados en la esquina de la calle de València, en régimen de alquiler, en una operación asesorada por la firma Busquets Gálvez. El local estaba ocupado anteriormente por una franquicia del grupo de heladerías estadounidense Häagen Dazs. En la misma esquina -concretamente, en el número 59 del paseo de Gràcia-, el café Torino dejó paso a principios de 2004 a la joyería Rabat, una firma familiar de Badalona. Ambos locales son propiedad de la misma familia barcelonesa.

El paseo de Gràcia prolonga así un pronunciado cambio de fisonomía. Los bancos y sedes de grandes empresas, mayoritarios en la década de 1970, han ido dejando paso en los últimos años a comercios, hoteles e incluso pisos de lujo, a unos precios que alcanzan los 10.000 euros por metro cuadrado en algunas promociones, según fuentes del sector inmobiliario. El intenso crecimiento de los precios ha provocado incluso la desaparición de antiguas oficinas, convertidas ahora en viviendas privadas. En cuanto a los alquileres, los precios de los mejores locales se sitúan en torno a los 150 euros por metro cuadrado al año, sólo superados por los de Portal de l'Àngel, la principal arteria comercial de la ciudad.

Goteo de marcas

Bulgari es la penúltima marca de lujo que se instala en el eje comercial barcelonés, tras un rosario de aperturas entre las que destacan las francesas Yves Saint-Laurent y Louis Vuitton -las dos últimas en llegar- y otras enseñas como Escada, Armani, Cartier, Chanel, Carolina Herrera y una de las más antiguas, Loewe.

El grupo italiano llegó a España en 1992, aunque sus orígenes se remontan a principios del siglo pasado, con una primera tienda en Roma en el año 1905. La firma de lujo ha iniciado ya las obras de acondicionamiento del local, donde venderá accesorios como gafas y bolsos, joyas, relojes, marroquinería o perfumes, según la compañía. El grupo, cuyo consejero delegado es Francesco Trapani, facturó unos 20 millones de euros en España el pasado año.