La Generalitat crea dos nuevos centros para menores en régimen de internamiento

El Departamento de Justicia de la Generalitat anunció ayer que construirá dos nuevos centros educativos para menores en régimen de internamiento, uno en Barcelona y otro en Tarragona, con una capacidad para 60 internos cada uno. Además de estos dos centros, Justicia habilitará cinco pisos para jóvenes en libertad vigilada en proceso de reinserción en la sociedad. Dos de estas viviendas, con capacidad para seis personas cada una, se ubicarán en la ciudad de Barcelona. Las otras tres se las reparten Tarragona, Lleida y Girona. Estas son algunas medidas que incluye el Plan Director de Justicia Juvenil 2004-2007, presentado ayer.

El plan, que pretende crear 147 nuevas plazas, se ha fijado como meta lograr que la cantidad de internamientos no supere el 10% en los próximos cuatro años y que el resto de casos se resuelvan a través de la mediación entre la víctima y el infractor. El Ejecutivo pretende disponer de 351 plazas para menores dentro de cuatro años.

El titular de Justicia, Josep Maria Vallès, explicó que el presupuesto de este año asciende a 22,7 millones de euros, lo cual supone un incremento del 18% en relación con el año anterior.

Las actuaciones se concretarán en crear medidas alternativas a la prisión, favorecer la integración social de los menores infractores y fomentar la implicación de los familiares. Así se intentarán subsanar "muchos problemas heredados del anterior modelo de justicia juvenil", que es "correcto pero también mejorable", explicó Vallès.

Una de las novedades del plan es la creación en el primer trimestre de 2005 de una unidad terapéutica con capacidad para cinco personas que albergará a enfermos mentales y drogodependientes, anexa al centro de menores de Els Til.lers en Mollet del Vallès.

Entre otras medidas destacan la ampliación de la oferta laboral a los jóvenes infractores, así como programas de prevención en colaboración con otros departamentos de la Generalitat. Para ejecutar las medidas se creará la Comisión Interinstitucional para la Reinserción Social (CIRSO).

En los últimos años el número de casos que llegan a la justicia juvenil ha aumentado el 42% sin que ello signifique que se haya producido un aumento significativo de la delincuencia juvenil, sino que es debido a la aplicación de la Ley del Menor de 2000 y la Ley de Justicia Juvenil de 2001, que cambió la edad en la que se adquiere responsabilidad penal y la pasó de 16 a 18 años.