Guipúzcoa investigará el descenso de declaraciones sobre patrimonio

El Departamento para la Fiscalidad y las Finanzas de Guipúzcoa va a inspeccionar de manera "inflexible" el descenso del número de declaraciones sobre el patrimonio registrado en la campaña de 2003, que concluyó el pasado 25 de junio. Este año ha habido 12.849 declarantes, frente a los 13.300 del ejercicio anterior, lo que arroja una diferencia a la baja de 451 casos, que la Diputación no encuentra justificada.

Las arcas forales han recaudado este año algo más de dinero que el pasado por el Impuesto sobre el Patrimonio: 29,6 millones de euros frente a los 29,3 de la campaña anterior. Pero este ligero aumento no ha hecho perder de vista a la Diputación la disminución del número de declaraciones presentadas. "Pensamos que más de un contribuyente guipuzcoano se ha relajado en esta modalidad", aseguró ayer el diputado para la Fiscalidad y las Finanzas, Juan José Mujika.

El titular de la Hacienda guipuzcoana no concretó la cifra de personas que, aun estando obligadas a declarar sus bienes inmobiliarios y mobiliarios (a partir de 181.000 euros), no lo han hecho, pese a que no necesariamente tendrían que haber ingresado dinero. Y es que la declaración sobre el patrimonio tiene una finalidad más de control de los bienes de los contribuyentes que recaudatoria.

En cualquier caso, Mujika se mostró convencido de que el número de declarantes debería haber sido mayor que el registrado. Su departamento cotejará durante las próximas semanas los datos de este año con los de ejercicios pasados para fijar cuántos contribuyentes no han cumplido con sus obligaciones y les remitirá las notificaciones oportunas.

"Es una modalidad de fraude, y nuestra obligación es ir contra ella", resaltó el diputado, quien indicó que la revisión que comienza ahora, una vez finalizada la "fase voluntaria", conlleva una serie de recargos y penalizaciones. El contribuyente tiene la posibilidad de cumplimentar de forma espontánea su declaración antes de recibir la reclamación administrativa. En este supuesto, y si el resultado es a pagar, tendrá que abonar los intereses de demora y una sanción del 30% del importe a ingresar. Pero si salda las cuentas con Hacienda depués de recibir su notificación, la sanción se eleva al 50%. En caso de que el declarante no tenga que pagar el impuesto, deberá hacer frente de todas formas a una sanción mínima de 90 euros por presentar la declaración fuera de plazo.

Preliquidaciones

Mujika se mostró más satisfecho con los resultados provisionales de la campaña del IRPF, Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. La Diputación guipuzcoana ha tramitado 335.000 declaraciones, un 3% más que el pasado ejercicio, de las que 268.000 han salido a devolver, un 8% más que el año anterior, con un importe medio de 986 euros. Las arcas forales han desembolsado 264 millones de euros y han ingresado 94,5 lo que arroja un saldo negativo para la Hacienda guipuzcoana de 169,5 millones.

Las preliquidaciones enviadas a contribuyentes con derecho a devolución han tenido buena aceptación. De las 74.309 remitidas, 57.034, esto es, el 77%, han sido aprobadas por los contribuyentes. Mujika anunció que el próximo año, dada su "eficacia", aplicarán también el sistema de preliquidaciones a las declaraciones en las que el ciudadano tiene que pagar a Hacienda.