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Una delegación del Gobierno balear carga como gasto la entrada a un local de alterne en Moscú

Un alto cargo dimite y se hace responsable de la factura tras alegar que ha sido de un error

El director gerente del Instituto Balear de Promoción del Turismo, Juan Carlos Alía, presentó ayer su dimisión al divulgarse que había cargado entre los gastos oficiales, con cargo a los presupuestos públicos, la entrada de siete personas al teatro erótico Rasputín, un club de alterne de Moscú. La visita se produjo en el curso de un viaje de carácter oficial a la capital rusa. La delegación, de siete personas, la encabezaba el presidente del Gobierno de Baleares, Jaume Matas, del PP. Matas declaró ayer que el intento de cobro ha sido un error y que él no tiene responsabilidad porque no acudió al club de alterne.

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También participaba en la delegación que visitó Moscú el consejero de Turismo, Juan Flaquer. El grupo acudió a Rusia para presenciar un partido del Mallorca y aprovechó para establecer contactos con agentes de viajes. Alía niega "con absoluta rotundidad" que Matas y Flaquer formaran parte del grupo que entró al teatro erótico "a tomar una copa", pero no quiso desvelar la identidad de sus acompañantes. La oposición reclama responsabilidades políticas y el grupo feminista Lobby de Dones asegura que se trata de un caso de malversación de caudales públicos y pide que intervenga la fiscalía.

El escándalo surgió de la misma Consejería de Turismo del Gobierno de Baleares, controlada por el PP, que incluyó los resguardos individuales y sellados del club de alterne moscovita en el expediente de liquidación de "gastos totales" de la comitiva. Los documentos fueron remitidos al Parlamento autónomo tras una pregunta del PSOE. El coste global de la visita de tres días a Rusia fue de 15.771 euros. Las entradas al teatro erótico costaron en total el equivalente a 129 euros.

La divulgación ayer de la noticia y de la documentación del caso por Diario de Mallorca provocó el inmediato sacrifico político de Alía, que asumió "el error, atribuible a la gran cantidad de facturas; al ser papeles en ruso, no sabes qué es". El dimisionario agregó otra factura de 240 euros de unas consumiciones particulares, que cargó a las partidas públicas. "Hablamos de un total de 369 euros, cantidad que afortunadamente puedo asumir, sin necesidad de imputar el gasto al expediente", manifestó.

El PSOE indicó que presentará iniciativas parlamentarias para aclarar este y otros posibles casos de irregularidades en viajes oficiales. El Gobierno Matas ha paralizado las respuestas detalladas tras remitir a la Cámara el historial del viaje a Moscú, una decisión asumida por la vicepresidenta, Rosa Estarás.

El diputado socialista Antonio Diéguez indicó que "el Gobierno de Matas tiene que dar una explicación; no es válido que se nos presente como víctima propiciatoria a Juan Carlos Alía, que era simplemente el encargado de las cuestiones administrativas. Quienes tomaron las decisiones fueron las autoridades políticas que participaron".

Por su parte, IU reclamó la devolución de las partidas irregulares "por simbólicas que sean". El Gobierno de Baleares informó en un comunicado oficial que Juan Carlos Alía había ingresado ayer mismo las cantidades distraídas en cuestiones no oficiales.

"Todos los ciudadanos de Baleares habríamos pagado esta canita al aire en Moscú si no se hubiera ejercido el control de la oposición", manifestó Pere Sampol, portavoz del Partit Socialista de Mallorca-PSM. "Que representantes de una delegación oficial de promoción del turismo cometan estas frivolidades hace mucho daño a la imagen internacional y da ganas de reír".

El colectivo feminista Lobby de Dones, "al margen de las valoraciones éticas" afirmó que la imputación de cuentas privadas a los presupuestos autonómicos representa un delito de malversación de caudales públicos. Lobby de Dones reclama a los grupos parlamentarios que remitan la documentación a la fiscalía para que se inicie el correspondiente proceso penal "para castigar conductas indignas".

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