CC OO acepta usar parte del superávit de la Seguridad Social para bajar las cuotas
El secretario general de CC OO, José María Fidalgo, comentó ayer la posibilidad de que parte de los excedentes del sistema de la Seguridad Social se destinen a compensar una rebaja de cotizaciones sociales "en momentos determinados". Dicho esto, Fidalgo aclaró que puede hacerse siempre que se mantenga "intocable" el fondo de reserva de las pensiones.
Fidalgo, que participó en el curso España y el camino hacia el pleno empleo, organizado por la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), presidida por José María Aznar, destacó en su conferencia que el pleno empleo es una aspiración general "difícil de alcanzar", a pesar de la buena evolución del empleo desde 1996, es decir, durante los ocho años de gobierno del PP. En la intervención previa, el secretario general de la CEOE, Juan Jiménez Aguilar, había declarado que si siguen la política de empleo de los últimos años y se mejoran los acuerdos de 1997 en el proceso de diálogo social que se iniciará en septiembre, el pleno empleo puede ser una realidad para 2008.
Precariedad
Fidalgo dijo que, pese a los buenos resultados de los últimos años, el mercado laboral tiene un problema de precariedad y de temporalidad que es preciso resolver. Para ello, considera necesario tener como referente la "emblemática" reforma de 1997, que trató de "modificar en positivo" la calidad del empleo después de que la reforma de 1984 "abriera el camino a la temporalidad masiva".
Añadido a esto, el secretario general de CC OO insistió en que la estabilidad y la seguridad del empleo favorecen la mejora de la productividad y que es necesario incrementar la inversión en formación y en investigación tecnológica. Fidalgo añadió que es un error culpar a los costes laborales de la baja productividad o competitividad, ya que los costes en España están entre los más bajos de la UE y ni es el país más competitivo ni el más productivo.
Tanto Fidalgo como Jiménez Aguilar se refirieron al último estudio de la OCDE sobre perspectivas del empleo, y mientras que el primero se mostró contrario a abaratar el despido al considerar que los costes laborales no suponen un problema para la competitividad, el representante de la CEOE insistió en la necesidad de reducirlo.
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