Familiares de las víctimas del Yak-42 piden que Trillo se vaya del Congreso

La mayoría de las familias de los 62 militares muertos en el accidente del Yak-42 exigió ayer que se asuman las "responsabilidades políticas y militares" que se derivan de los numerosos errores cometidos en la identificación de los cadáveres. Los familiares quieren que Federico Trillo, ministro de Defensa cuando ocurrió el accidente, deje su acta de diputado por Alicante. El PP no responde. Sólo se pronunciará cuando conozca el informe sobre la identificación errónea.

Carlos Ripollés, presidente de la asociación que agrupa a la mayoría de familiares de las víctimas, señaló como principal culpable al ex ministro de Defensa Federico Trillo-Figueroa, quien "en repetidas ocasiones dio informaciones falsas al Parlamento", por lo que "debe entregar de manera inmediata su acta de diputado si le resta algo de dignidad". La asociación de familiares también reclamó la destitución de la cúpula militar.

Estos deseos se vieron cumplidos, ya que el Consejo de Ministros aprobó el relevo de los jefes del Estado Mayor de la Defensa y del Ejército de Tierra, aunque Bono desvinculó su cese del escándalo del Yak-42."No deseo establecer ninguna relación directa entre el accidente y el relevo, la decisión no supone exigencia de responsabilidad alguna por el caso del Yakóvlev", afirmó ayer el ministro en la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros.

Fuentes de Defensa admitieron, no obstante, que el pase a la reserva de los militares que ocupaban los puestos de máxima responsabilidad en el momento del siniestro, mayo de 2003, alivia la presión y resguarda a las Fuerzas Armadas del escándalo.

El nuevo jefe del Estado Mayor de la Defensa es Félix Sanz Roldán, que era hasta ahora director general de Política de Defensa. El jefe del Estado Mayor del Ejército nombrado ayer es José Antonio García González y Francisco José García de la Vega, el nuevo jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire.

El Gobierno está dispuesto a dispensar a las familias de los muertos en el Yak-42 un trato similar al de las víctimas del terrorismo.