_
_
_
_
VISTO / OÍDO
Columna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las columnas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

Otro delito: sexual

No creo que sea un delincuente el cardenal (colombiano) López Trujillo, pero, a raíz de sus declaraciones en Madrid, pienso si habría que crear un delito de falsa información. No de opinión: el pensamiento no delinque, ni su expresión tampoco, aunque aquí mismo haya leyes específicas que no están de acuerdo con esa idea, como la Ley de Partidos, y quizá una posible ley de religiones que se va extendiendo desde el nuevo ministro del Interior, amparada en el antiterrorismo como pretexto, que repite leyes fascistas y, peor aún, leyes democráticas, como la de Actividades Antiamericanas (McCarthy). El cardenal, que representa al Vaticano en estos temas, afirma que el condón es una "ruleta rusa" para el sida, y que en el caso de utilizar el preservativo, y se mantienen relaciones sexuales durante cien veces, la posibilidad de contagio aumenta hasta el 30%. Pienso que sería necesario que el fiscal general abriera un sumario por lo que pueda tener de falsa información dañina; más, viniendo de lo que se suele llamar "Príncipe de la Iglesia". La Iglesia tiene una doctrina permanente y antigua en la que se defiende la castidad, la abstinencia, hasta el punto de asegurar contra toda posibilidad que María dio a luz siendo virgen. Pero ese tipo de informaciones son, sobre todo, opiniones y no admiten prueba en contrario, teniendo en cuenta que el sentido común no constituye prueba. Los dogmas de la Iglesia son pocos. Y no aceptar ese tipo de "informaciones" ya no se castiga. En algunos países, sus dogmas han sido considerados como falsa información y castigados, pero tienen otras falsas informaciones, producto de su Estado confesional, que son imposibles de castigar, puesto que el que castiga es el mismo que cree.

La abstinencia en sí no es nada; ni la castidad. Es una opinión y como tal puedo hasta aumentarla: puede ser perjudicial. Los informadores son los sexólogos desde Stekel o Havelock Ellis, o Freud, o el Kinsey de ahora: desde el XIX hasta hoy. Cierto que para la Iglesia los sexólogos "son una nueva raza de impostores con aires de científicos" (www.catholic-church.org/mscperu/castidad_porno/pornoinfo/porno03.htm; para los creyentes o quienes prefieren la castidad; muy útil como opinión).

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_