"Hay que aprovechar esta coyuntura para hacer justicia con Andalucía"

Pregunta. ¿Cómo se ve la política autonómica desde este lado de la barrera?

Respuesta. La estructura de la Junta está muy por encima de la media de lo que es la estructura del Estado en la periferia, ya que en Andalucía ha habido un proceso de modernización en los últimos años. En cuanto a la posición política, desde la Delegación del Gobierno vamos a intentar poner un punto y aparte a lo sucedido. Dado que el Gobierno de la nación es del mismo color político que el de la Junta, hay que aprovechar esta coyuntura para hacer justicia a muchas viejas reivindicaciones que Andalucía tenía pendientes desde una posición justa, no de privilegio.

P. ¿Esta coincidencia va a rebajar el perfil político del delegado del Gobierno?

"Es urgente que el dispositivo de vigilancia del Estrecho se amplíe a toda la costa"

"No nos consta que exista una estructura de reclutamiento con fines terroristas"

R. Ahora estamos en una situación idílica, pero llegarán momentos complicados porque los intereses generales del Estado no siempre van a coincidir con los de las demás comunidades. Y ahí voy a tener que tirar de capacidad negociadora y de objetividad.

P. ¿Cuáles son las reivindicaciones más urgentes a resolver?

R. En primer lugar, sin duda alguna, la parte económico-financiera: la liquidación de la deuda de financiación del periodo 1997-2001, fijada en 2.500 millones de euros. En segundo lugar, hay un bloque de transferencias pendientes que se negocian.

P. El PP ha hablado de rebajas de la Junta al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.

R. El tiempo pondrá a cada uno en su sitio. El PP vive ahora la enorme frustración de perder unas elecciones, para lo que ha hecho méritos, y también de que la Junta de Andalucía va a conseguir de la Administración del Estado un tratamiento justo. Va a ponerse en evidencia que en estos ocho años ha habido un abandono de los intereses generales de Andalucía. No me cabe duda de que el Gobierno de España va a cumplir, en razón de justicia, con todas las reivindicaciones que se habían planteado en estos años.

P. ¿Pretende establecer mecanismos de coordinación con la Junta?

R. El encargo que he hecho a los subdelegados es que de los análisis de los organismos del Estado y de las atribuciones de la Junta han de derivarse instrumentos de cooperación entre ambas administraciones. En junio y julio haremos este trabajo, y en septiembre propondremos a la Junta ese conjunto de instrumentos de cooperación para alcanzar los objetivos con mayor eficacia.

P. ¿Qué opina de la petición de indulto del Ayuntamiento de El Ejido a dos agricultores condenados por agredir a inmigrantes?

R. La inmigración es una situación social y económica nueva en España, especialmente en Andalucía. Y como nueva situación tenemos que hacer un esfuerzo colectivo los agentes económicos y sociales, las instituciones y la sociedad. Tenemos que abordar nuevos instrumentos que permitan la presencia en nuestro territorio de ciudadanos de manera legal. Dicho esto, lo que ocurrió en El Ejido hace algún tiempo fue una situación desgraciada a la que hay que ponerle un punto y final. Tenemos que dar mensajes claros a la ciudadanía. Hay una decisión judicial que responde a los hechos acontecidos en su día que deben ser cumplidos y es la manifestación que ha hecho el ministro de Justicia.

P. ¿Cómo máximo responsable de la seguridad en la comunidad qué puede hacer para evitar esos focos de tensión?

R. Las fuerzas de seguridad del Estado van a velar por que las condiciones laborales de los inmigrantes cumplan todos los requisitos. Y al mismo tiempo, los derechos también llevan aparejados deberes. También vamos a ser exigente en el cumplimiento de esos deberes. Hay una política de integración social donde deben coincidir la administración local, la autonómica y la del Estado para crear una respuesta positiva y no convertir la presencia de inmigrantes en guetos. Los inmigrantes tienen unas diferencias con nosotros desde el punto de vista religioso, cultural, del idioma, de costumbres, que deben ser respetadas, pero hay que introducir instrumentos de integración. La inmigración, guste más o menos, es un hecho irreversible. Por eso es importante hacer ese conjunto de acciones donde la llegada de esos inmigrantes se haga en función de las necesidades de nuestro mercado laboral para que su presencia aquí se haga de manera legal y respetando las condiciones laborales y sociales adecuadas.

P. ¿Por qué Motril (Granada) se está convirtiendo en punto de entrada de inmigrantes, desplazando a la costa de Cádiz?

R. Eso demuestra que el sistema de vigilancia que se había establecido

[el Sistema Integral de Vigilancia Exterior, situado en el estrecho de Gibraltar] es absolutamente útil. Es urgente que el dispositivo se amplíe a la mayor brevedad posible a toda la costa andaluza. De la última visita que hizo el presidente de España a Marruecos también van a derivarse nuevas actuaciones de colaboración del Gobierno marroquí con el de España para impedir ese tránsito tan trágico.

P. ¿Qué actuaciones?

R. Tenemos que profundizar en la cooperación con las autoridades del norte de África, especialmente con Marruecos, que es la frontera más cercana, para poder conseguir medidas eficaces en ese sentido. Con el sistema de vigilancia actual, más otros que se puedan poner en marcha, se puede conseguir que ni siquiera haya margen de maniobra para que una patera inicie la travesía. Es una obligación política y moral. También hay que dotar a las fuerzas de seguridad del Estado de los medios suficientes para impedir el paso y cuando se produzca, que tengan los medios para auxiliar a los inmigrantes.

P. ¿Va a haber medidas especiales en la Operación Paso del Estrecho?

R. La Operación Paso del Estrecho la consideramos de seguridad vial y de frontera. Son miles y miles de trabajadores procedentes de países de Europa que van en periodo vacacional. Lo que sí es cierto es que los acontecimientos de los últimos meses han llevado a activar a las fuerzas de seguridad con mayor intensidad.

P. Atime

[organización que aglutina a trabajadores marroquíes en España] ha denunciado la posibilidad de que grupos islamistas radicales capten a inmigrantes en situaciones marginales. ¿Tiene constancia de que esto haya ocurrido?

R. No nos consta que en Andalucía exista alguna estructura de reclutamiento de ciudadanos con fines terroristas. Además debemos hacer un esfuerzo para no crear en la sociedad espíritu de sospecha de cualquier extranjero que está en nuestra tierra, sino de crear las mejores situaciones de convivencia. Los guetos y la marginación son un caldo de cultivo en los que puede aparecer la delincuencia, sean extranjeros o ciudadanos nacidos en Andalucía. En la medida que vayamos desarrollando políticas en este sentido, estaremos combatiendo ese peligro. Eso no quita, como es lógico, que las fuerzas de seguridad, ante nuevas situaciones, pongan en marcha mecanismos que nos permitan estar siempre en situación de alerta. A veces el crecimiento económico, sobre todo en la franja del litoral, trae la consecuencia de llegada de ciudadanos que no vienen precisamente con fines constructivos, sino delictivos.

P. ¿Se van a vigilar las mezquitas?

R. El ministro ha querido decir que hay que tener más información de las actividades que se producen en estos entornos, no poner bajo sospecha a los dirigentes religiosos de las distintas religiones. Hace 20 años no tenía sentido captar información sobre este asunto, porque no había apenas inmigrantes en nuestro territorio. Es lógico que las fuerzas de seguridad quieran tener información.

P. ¿Es partidario de la regularización de los inmigrantes que ya están asentados en Andalucía?

R. No debemos ir a una regularización de urgencia porque siempre tendremos situaciones de ciudadanos en situación irregular. Tenemos que crear mecanismos de cooperación para que en el lugar de origen se puedan establecer las condiciones laborales de los trabajadores que van a venir. La situación temporal o definitiva dependerá de las necesidades del sistema productivo andaluz. Luego hay que atender los problemas de atención sanitaria, educativa, formativa. Hay muchas materias en las que el Gobierno, la Junta y la Administración local deben colaborar.