La mitad de las personas mayores que viven en residencias sufre malnutrición

Ser mayor de 80 años, como 1,5 millones de personas en España, es un "factor de riesgo para tener algún tipo de malnutrición", afirmó ayer el presidente de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, Isidoro Ruipérez. La situación es peor si está ingresado en una residencia o un hospital.

Entre las personas mayores, la malnutrición, desde el déficit de vitaminas y minerales hasta pérdidas de peso o falta de proteínas y calorías, ronda el 50%, añadió Ruipérez. En la población sana, la situación casi no se da salvo en grupos marginados, afirmó la presidenta de la Sociedad Española de Nutrición Básica y Aplicada, Carmen Gómez Candela. En los

mayores que viven en casa o con su familia el porcentaje de malnutridos oscila entre el 3% y el 15%, indicó el geriatra.

Entre las causas de esta situación están la falta de apetito, la dificultad para tragar u otras enfermedades, pero "en ningún caso por ser mayor se tiene que tener menos apetito o perder peso, ni ganarlo", indicaron los expertos. Cuando esto sucede hay que investigar qué ocurre. Influyen factores como problemas con los dientes, cambios en el olfato y el gusto, la medicación, la discapacidad, la soledad o directamente la pobreza de los mayores. A ellos se une la monotonía de la dieta en residencias y hospitales.

Ante esta situación, la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética, que hoy celebra el día nacional de la nutrición, ha editado un decálogo. "La alimentación de los mayores debe ser igual que la del resto: variada, nutritiva y repartida en cinco o seis ingestas", indicó Gómez Candela.