El fiscal acusa al ex gerente de Somuvisa de simular contratos

La Fiscalía y la acción popular, representada por el grupo municipal del PSOE, reiteraron ayer que el ex gerente de la Sociedad Municipal de la Vivienda (Somuvisa) de Jaén, Julio Hidalgo, simuló un contrato privado de compra-venta para eludir su imputación por los presuntos delitos de negociación prohibida a funcionarios y falsedad documental en la compra y venta de solares.

Durante el juicio con tribunal del jurado celebrado en la Audiencia, Hidalgo y otros dos acusados negaron que intentaran lucrarse a costa del Ayuntamiento, y sus defensas aludieron a una supuesta intención "mediática" del PSOE y a un interés por sentar en el banquillo al ex presidente de Somuvisa y actual concejal de Presidencia, Miguel Segovia (PP), quien declaró como testigo.

Tanto el fiscal, Juan Ignacio Fernández, como el letrado de la acción popular, Alfonso Martínez del Hoyo, reprocharon a Hidalgo que no se abstuviera en la votación del Consejo de Administración de Somuvisa donde se acordó la adquisición de cinco solares en el casco antiguo jiennense. Estos solares pertenecieron en primera instancia a una sociedad en la que participaba el propio Hidalgo y que luego se ofertaron a la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento tras pasar previamente por una empresa intermediaria.

También pusieron de relieve la falta de pruebas del contrato de fecha 11 de marzo de 1999 (cuatro meses antes de que Hidalgo fuese nombrado gerente de Somuvisa) suscrito con los empresarios Juan Huertas y Enrique González Peñas, los otros imputados que se sentaron en el banquillo de los acusados. Huertas, cuñado de Hidalgo, era apoderado de la empresa Dama Cohida, propietaria del 50% de los solares que luego fueron ofertados al Ayuntamiento, mientras que González Peñas era el responsable de la firma Depusan que, según las acusaciones, actuó como intermediaria en la operación.

La acción popular preguntó al ex gerente de Somuvisa por qué los solares se vendieron al Ayuntamiento por 96.161 euros, cuando unos meses antes la Empresa Pública del Suelo de Andalucía (EPSA) había aceptado su compra por 74.044 euros.

Hidalgo defendió la legalidad del contrato privado y dijo que fue una "operación buena" para el Ayuntamiento. "Puestos a hacer una operación ficticia se hubieran comprado los solares por 150.000 euros", aseveró Hidalgo, que añadió que por encima de él estaba la opinión de la Gerencia de Urbanismo.