Destituida un alto cargo municipal por pedir el desalojo de mendigos de Mayor
El PSOE calificó la orden de "fascista"
La directora general de Turismo del Ayuntamiento de Madrid, Covadonga González Quijano, fue destituida fulminantemente el pasado viernes, después de que el concejal socialista Óscar Iglesias denunciara que esta responsable municipal había firmado una orden para expulsar a los indigentes de la plaza Mayor. González Quijano envió un correo electrónico a la Junta de Centro en el que solicitaba que los mendigos que duermen o piden limosna en la zona de acceso a la Casa de la Panadería fueran desalojados, porque allí se iba a presentar una revista de turismo.
El consejero delegado de Economía y Participación Ciudadana en el Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón, Miguel Ángel Villanueva, firmó la destitución de González Quijano al enterarse del contenido de esa orden, de la que, según afirmó, no tenía ningún conocimiento. En el correo enviado por la directora general de Turismo a los responsables de la Junta Municipal de Centro se les anunciaba que el jueves 13 de mayo iba a tener lugar, a las ocho de la tarde en el Salón Real de la Casa de la Panadería, la presentación de una Guía de Madrid a cargo de la editorial Conde Nast Traveller, acto que iba a presidir el propio Villanueva.
"Mucho te agradecerá [en referencia al titular de Economía] des las órdenes oportunas para que extremen la limpieza de la entrada y, especialmente, liberen la entrada del grupo de mendigos que habitualmente están situados en la zona de acceso", señalaba la directora del Patronato en la misiva electrónica.
Esta orden fue transmitida por el asesor de seguridad de la Junta Municipal de Centro al mando de la Unidad Integral del distrito de la Policía Municipal para que fuese cumplida. Sin embargo, y según fuentes de la Concejalía de Seguridad y Servicios a la comunidad, de quien depende el cuerpo policial, la orden nunca fue ejecutada.
El concejal del grupo socialista Óscar Iglesias denunció el mismo viernes por la mañana "las formas y el lenguaje fascista utilizado por los responsables municipales para limpiar la ciudad" cuando los mendigos les son molestos. "Es lamentable que se den órdenes de este tipo. Y más abominable es que echen a los mendigos para que los actos les queden bonitos. Quizá sea la democracia que propugna el alcalde de Madrid y todos sus concejales", protesta el edil. Óscar Iglesias anunció, además, que denunciará este abuso de autoridad ante la Comisión de Seguridad que se celebra la próxima semana, y que allí exigirá explicaciones a los mandos de la Policía Municipal.
"En lugar de hacer este tipo de burradas contra personas que lo están pasando realmente mal, deberíamos ir hacia la creación de un consejo municipal de inclusión social en el que se busquen medidas para que esas personas que casi se encuentran fuera de la sociedad puedan volver a ella", continúa el concejal. También apostó Iglesias por un plan integral contra la pobreza en el que participen todas las concejalías del área de Servicios Sociales, y un nuevo albergue para dar cobertura a todos los indigentes que están en las calles. El socialista defiende por último la idoneidad de construir una casa de acogida para enfermos terminales que carezcan de familiares o medios para subsistir.
Forma y fondo
Sin embargo, la respuesta del equipo de gobierno municipal no se hizo esperar ni un día. El consejero delegado Villanueva firmó esa misma tarde del viernes la destitución de la directora general de Turismo, Covadonga González Quijano. El responsable de Economía y Participación Ciudadana aseguró que desconocía la existencia del correo electrónico y que se enteró de su contenido al ser informado por EL PAÍS. "La desautorizo por completo, tanto por la forma como por el fondo. Leerlo me ha producido indignación y acabo de firmar esta misma tarde [por el viernes] la destitución fulminante de esta persona, que ha perdido mi confianza", señaló el concejal.
La ahora destituida ya estuvo en entredicho en octubre de 2002. El día 18 de ese mes, la concejal del PSOE Marta Rodríguez Tarduchy denunció que una carta firmada por González Quijano y por el edil del PP Simón Viñals, en calidad del presidente del Patronato Municipal de Turismo, sirvió de recomendación para la empresa Trapsa / Trapsatur, que fue la adjudicataria del concurso de los autobuses turísticos de la capital Madrid Visión, al que concurrieron cinco ofertas.
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