"No vamos con la bandera del 'hip hop"
En su tercera edición, Break On Stage, concurso europeo de breakdance escénico, da el salto del Arriola Aretoa de Elorrio al Palacio Euskalduna. El cambio de ubicación ha permitido su ampliación a grupos europeos, y mañana presentarán sus coreografías y sus acrobacias tres españoles (Addictos, Totales y Boogie Bastards), dos franceses (Pockemon, Fantastik Armada), uno suizo (Deep Trip) y otro inglés (One Motion). Imanol Garaizabal (Elorrio, 1975) es uno de los organizadores del evento.
Pregunta. ¿Qué ofrece Break On Stage?
Respuesta. Los siete grupos europeos más en forma dentro del breakdance, haciendo coreografías de seis minutos en las que se combina la energía del breakdance con proyecciones multimedia que permiten que los bailarines se mezclen con las imágenes.
P. ¿Cuáles son sus objetivos?
R. Uno es dar oportunidad a los grupos de la calle para que experimenten con soportes escenográficos y tiendan a profesionalizarse. Otro es crear un espectáculo de breakdance de hora y media en el que se mezclan danza y nuevas tecnologías, a nivel visual y de interactividad.
P. Pero el break nació en la calle. ¿No supone desnaturalizarlo?
R. Sí, pero nosotros tampoco vamos con la bandera del hip hop. Lo que hacemos es una muestra de breakdance coreográfico; no estamos dentro del movimiento del hip hop, sino en la periferia. Valoramos lo que se está haciendo, es una cultura viva y evoluciona continuamente.
P. ¿El breakdance ha salido del gueto?
R. Por supuesto; al fin y al cabo son coreografías de baile. Hay gente que va a mezclar el flamenco o sonidos africanos con el breakdance. El espectáculo está dirigido a todo el mundo.
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