Editada una guía para evitar el maltrato a mayores
El Departamento para la Política Social de Guipúzcoa ha editado 5.000 ejemplares de una guía dirigida a prevenir, descubrir y actuar ante situaciones de maltrato a las personas mayores. El manual recoge pautas para descubrir situaciones de abusos, orienta al anciano sobre qué hacer si es víctima o conoce algún caso cercano y propone un modelo de atención e intervención por parte de las instituciones.
Apenas existen investigaciones sobre los casos de malos tratos a ancianos, pero, según un estudio de la Diputación de Álava, este problema afectaría a un 5,4% de la población con más de 65 años, según apuntó ayer el autor del texto, Ángel Morales, médico adjunto del Servicio de Radiodiagnóstico del Hospital Donostia.
La negligencia en el cuidado físico y afectivo y el maltrato psicológico y emocional son los más frecuentes, aunque no faltan casos de agresiones físicas ni otros en los que se suman varios tipos de abusos, como explicó el doctor Morales.
El propio entorno familiar es el espacio más habitual en el que se produce el maltrato, aunque también se registra en los centros residenciales, sobre todo en los privados. El perfil de la víctima es el de una mujer, viuda, mayor de 75 años, impedida física o mentalmente y cuyo cuidador principal, generalmente un familiar, lleva más de un año atendiéndola.
El director foral de Recursos Sociales, Ramón Jauregi, subrayó la importancia de ofrecer apoyos a los familiares cuidadores, como formación, asistencia psicológica o estancias temporales de los ancianos en residencias a fin de evitar posibles situaciones de malos tratos. Casos que, a veces, "se producen de forma inconsciente o por acumulación de estrés de los cuidadores", indicó.
Por otro lado, el Colegio de Enfermería de Guipúzcoa solicitó a las instituciones vascas un plan sociosanitario que incluya la atención integral a los ancianos que permanecen en sus domicilios, una atención que pasaría por incorporar a los enfermeros como los profesionales adecuados para cuidar a estas personas, prevenir ciertos problemas de salud y educar en esta materia tanto a los ancianos como a sus familiares cuidadores.
