50 familias de Aranjuez piden que cese la expropiación de sus casas

Unas 50 familias de la zona conocida como El Raso de la Estrella, en Aranjuez, han solicitado al Ayuntamiento de la localidad que paralice cuanto antes el expediente de expropiación de los terrenos sobre los que se asientan sus casas. Estos propietarios, que se encuentran al lado del palacio Real, mantienen que poseen sus viviendas en algunos casos desde hace más de 50 años y que muchos de sus moradores han nacido en ellas.

El Consistorio recogió en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 1996 el documento que rige el urbanismo de una localidad, que este pequeño barrio se convirtiera en zona verde a la par que eran expropiadas las antiguas huertas situadas en Las Cabezas, una inmensa parcela junto al río en la zona oeste del municipio. En esta zona irá un canal de remo, lo que convertiría a Aranjuez en subsede olímpica si Madrid organiza los Juegos Olímpicos de 2012.

El presidente de la Asociación Raso de la Estrella, Francisco José Santos, asegura que los primeros residentes en esta zona comenzaron a instalarse a principios del siglo pasado. Poco a poco los vecinos fueron adquiriendo los terrenos y fueron mejorando las casas que tenían. De hecho, todos tienen escrituradas sus viviendas y cuentan con todos los servicios de un barrio: canalización de agua, luz o alcantarillado, entre otros. "No entendemos por qué el Ayuntamiento nos quiere echar y convertir esta zona en jardines, cuando hay viviendas que están más cerca del palacio. Somos un barrio más de la ciudad", señala Santos.

"Proceso irregular"

Los afectados han mantenido diversas reuniones con el alcalde de la localidad, el socialista Jesús Dionisio. Éste les ha comunicado que es imposible paralizar la operación urbanística, ya que va unida a la del Plan de Las Cabezadas, que supondrá unas 4.000 viviendas para el municipio. Al estar recogido en el PGOU, es una norma de obligado cumplimiento. Los vecinos, por su parte, aseguran que el proceso de adjudicación a la empresa Isolux ha sido, cuando menos, "irregular". Por eso, además de presentar alegaciones a este plan municipal y de pedir su paralización, no descartan acudir a la vía judicial si de este modo paralizan el proceso de expropiación.

Y es que los vecinos quieren seguir viviendo en sus casas, ya que algunos de ellos han nacido en ellas. Ya han recogido varios miles de firmas de vecinos que les muestran su apoyo y que piden que el barrio continúe como hasta ahora. "Lo que pedimos es que la zona se arregle y se invierta el dinero que sea necesario para recuperarla", señala el presidente de la asociación.

Y es que un simple paseo por la zona demuestra las carencias de esta zona. Algunos viales están plagados de baches, y la comunicación con el centro de la localidad se hace por una calle también mal asfaltada. "Frente a la opción de pasar el rastrillo, pedimos alternativas para que convivan los diferentes intereses, recuperando la zona para el uso y disfrute de todos los ciudadanos y visitantes de Aranjuez, en convivencia de nuestras viviendas y propiedades existentes desde hace décadas", explica Santos.

"Tampoco hay ningún proyecto de revitalización de la zona en marcha, ya que ni la empresa adjudicataria del nuevo barrio de Las Cabezadas ni el Ayuntamiento tienen asignado un solo euro para arreglar y mantener la zona, por lo que, si se produce la expropiación de la zona como está prevista, quedará hecha un erial y abandonada durante décadas, como ya ocurre con muchos otros terrenos y edificios históricos de Aranjuez (las huertas históricas, la plaza de las Doce Calles, el Gran Teatro, el hospital de San Carlos, entre otros)", añade Francisco José Santos.