_
_
_
_
EL NUEVO MARCO LABORAL

Fidalgo pide al Gobierno no repetir errores

Los sectores críticos reprochan al secretario general los acuerdos firmados con el PP

El secretario general de CC OO, José María Fidalgo, lanzó ayer un claro mensaje al Gobierno del PSOE ante el inminente diálogo social: su sindicato está en disposición de debatir reformas y cambios legislativos, incluso los desea, pero espera ser escuchado en todas sus propuestas para corregir la precariedad del empleo, mejorar la protección social o garantizar la viabilidad futura de las pensiones. No quiere repetir los episodios "de fuerte confrontación" de la anterior etapa socialista, con cuatro huelgas generales, y confía en que ambas partes hayan tomado nota de los "errores" del pasado.

"Todos hemos aprendido", dijo. "No pediremos que todo se pacte con nosotros, pero sí queremos que algunas experiencias, buenas y malas, sean tomadas seriamente en consideración antes de proceder a reformas legislativas o a cambios en orientaciones presupuestarias". Es decir, admite que puede ser mejorable la negociación colectiva, la organización del trabajo, la inserción de los inmigrantes o la igualdad de trato entre mujeres y hombres, pero sostiene que para que los cambios sean eficaces han de requerir el máximo consenso posible.

Más información
La vuelta de Mambrú
El Gobierno promete no hacer reformas por decreto y subir un 30% el salario mínimo
Benito decide no presentarse a la Secretaría General de CC OO
Fidalgo, reelegido secretario general de CC OO con el 59% de los votos

Al nuevo Gobierno le ofreció "la misma voluntad y empeño en el diálogo que ofertamos al que ha sido relevado". La firma de acuerdos con el PP es uno de los principales reproches que le hicieron ayer los representantes de los dos sectores críticos que lideran Agustín Moreno y Rodolfo Benito.

Sintonía con Caldera

Buena parte del discurso de Fidalgo ante los 1.001 delegados del 8º Congreso de CC OO fue una especie de anticipo de cómo quiere encarar el diálogo social y expresó mucha sintonía con los criterios avanzados previamente por el ministro de Trabajo, Jesús Caldera. También quiere mejorar la competitividad y coincide en que es un problema de la economía española. Ahora bien, avanza que "no va a resolverse deprimiendo los costes laborales, que son inferiores a los medios de la Unión Europea".

Su alternativa es "invertir para dotar al aparato productivo" de las carencias que existen en capital tecnológico, inversión en I+D+i y gasto educativo. Lo explicó de la siguiente manera que, a su juicio, entiende todo el mundo: "Sólo hay dos formas de incrementar la productividad de cada puesto de trabajo: recurrir al recorte del coste de la mano de obra o dotar cada puesto de trabajo de mayores herramientas de productividad".

Esa segunda opción, que él defiende, requiere inversión pública y privada y que en reformas anteriores "han pretendido sustituirse por flexibilidad externa", que en su opinión han provocado "temporalidad abusiva, fraude en la contratación y desregulación".

Fidalgo espera que entre los compromisos que salgan del Congreso de la central figure "una mayor eficacia de la acción sindical en las empresas", así como la defensa de la mejora de la protección social, ampliándola a campos como las personas dependientes y el apoyo a las familias, y apostar por ser "agentes de cohesión social" para que se refuerce el Estado de bienestar.

Una apuesta por el diálogo y el acuerdo que es su opción prioritaria, pero sin renunciar a "canalizar eficazmente y sobriamente el conflicto social, cuando el conflicto se nos imponga". Un mensaje de dureza dirigido también en clave interna, destinado a los dos sectores críticos de Moreno y Benito que le reprochan haber firmado demasiados acuerdos con el Partido Popular.

Rodolfo Benito aseguró que el informe presentado por el secretario general "no contiene ninguna novedad, no plantea que el sindicato debe estar presidido por la diversidad". Para su grupo, contiene "una línea ambigua frente al nuevo Gobierno y no presenta críticas a la gestión del Partido Popular en materia social y laboral". En el debate posterior sobre el informe de José María Fidalgo, sus detractores pusieron énfasis en las peleas internas y en asegurar que se ha producido una falta de respeto a la pluralidad.

Los asistentes dedicaron un aplauso de bienvenida a los ex secretarios generales Marcelino Camacho (de pie) y Antonio Gutiérrez (derecha).
Los asistentes dedicaron un aplauso de bienvenida a los ex secretarios generales Marcelino Camacho (de pie) y Antonio Gutiérrez (derecha).RICARDO GUTIÉRREZ
Mariano Rajoy saluda a Gaspar Llamazares.
Mariano Rajoy saluda a Gaspar Llamazares.RICARDO GUTIÉRREZ
Santiago Carrillo y el ex ministro Manuel Pimentel.
Santiago Carrillo y el ex ministro Manuel Pimentel.RICARDO GUTIÉRREZ

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_