Otro desahucio

Escribo estas líneas desde una profunda tristeza e incomprensión ante la situación que está viviendo la asociación que presido. No es más que uno de los cientos de casos de especulación urbanística de dudosa legalidad, así como amorales, que se vienen produciendo en Sevilla, siendo, como siempre, los perjudicados los grupos más desfavorecidos (ancianos, jóvenes, familias con ingresos limitados, pequeños comercios, ...) y sin recursos económicos para defenderse adecuadamente, como ha ocurrido recientemente en los casos de las familias de La Florida o a Rosario Piudo, desahuciada por apenas 39 euros en la Encarnación.

Quiero denunciar, como miembro de Scouts de Sevilla-MSC, cómo nuestra asociación, con más de mil asociados, que trabaja realizando una labor educativa y sin ánimo de lucro con niños y jóvenes en toda Sevilla (Alameda, San Luis, Triana, Polígono San Pablo, Polígono Sur, etc.), nos hemos visto expulsados del local que teníamos en la calle Quevedo, número 15, imprescindible para nuestra labor y arrendado con contrato en vigor, debido a la acción maquiavélica e inmoral de la inmobiliaria Dexter y Celer. Esta empresa forzó la situación hasta el extremo de vernos obligados a abandonar el local, no por propia voluntad, sino por orden expresa de la Policía Local ante la inseguridad manifiesta de la vivienda, provocada por las supuestas obras de reforma del piso superior, que produjeron daños materiales en el que tenemos arrendado y originó severos riesgos para la integridad de las personas que allí trabajamos. Tras ello Dexter y Celer, mientras anuncia con toda tranquilidad e impunidad por toda nuestra ciudad la venta de unas idílicas "viviendas singulares" (las de dicho inmueble), ha iniciado una reforma total del edificio (éramos los únicos que habíamos resistido la presión de la inmobiliaria y seguíamos firmes), estando dispuesta a seguir adelante, aun existiendo arrendatarios (nosotros) con contrato en vigor (ver su página web), lo que se evidencia pasando simplemente por las obras y observando que hasta han modificado la estructura y dimensiones de la vivienda. Además, esta promotora nos tiene completamente desinformados respecto al estado actual de las obras, así como de cuándo podremos volver al local del que somos inquilinos, ya que su intención es venderlo.

Por todo esto, nos manifestaremos durante el mes de abril en el Ayuntamiento de Sevilla, y animo desde aquí a unirse a nosotros a todos aquellos que sufran estos casos, o simplemente que en estos momentos se sientan como nosotros y quieran luchar contra esta injusticia que, como tantas otras, amenaza con ser otra injusticia más de nuestro tiempo.