El ex alcalde del PP en La Riba dimite y lanza duras críticas al partido

El único alcalde del Partido Popular en las comarcas de Tarragona durante el pasado mandato, Jordi Cartanyà, ha presentado su dimisión como afiliado al PP, junto con los demás integrantes de la candidatura de esta formación en el municipio de La Riba (Alt Camp), lanzando fuertes críticas a la dirección. Cartanyà es ahora teniente de alcalde del Ayuntamiento, gobernado por Convergència i Unió.

Jordi Cartanyà abandona el PP tras 23 años de militancia porque, a su juicio, la dirección del partido en Cataluña ha sido la culpable de que La Riba no haya obtenido una subvención de 600.000 euros correspondientes al 1% cultural de las obras del AVE en el municipio. "Ha habido una mano negra", dijo. Pero también se mostró muy crítico con la dirección del partido, a la que atribuyó la responsabilidad de la pérdida de votos en las últimas elecciones generales.

Los 600.000 euros que había solicitado el Ayuntamiento de La Riba estaban destinados a rehabilitar un museo de la localidad. "No culpo al Ministerio de Fomento, sino al propio partido en Cataluña, que va de mal en peor", señaló Cartanyà, que ha ocupado destacados cargos orgánicos dentro del PP: ha sido miembro de la junta directiva de Cataluña y de la dirección provincial, así como presidente comarcal del partido en el Alt Camp. Cartanyà abandonó estos cargos hace siete meses por "discrepancias con la dirección".

El ya ex militante popular suscribió al cien por cien la petición de dimisión del presidente del Partido Popular catalán, Josep Piqué, que hace unas semanas lanzó otro histórico dirigente popular, Josep Curto. "Donde no hay seriedad no me gusta estar", afirmó, y criticó a la dirección del partido por imponer sus criterios en contra de la opinión de la militancia. "A mí no me hacen comulgar con ruedas de molino", dijo.

La dimisión de Cartanyà llega después de que varios mandos del PP hayan recriminado a Piqué su escasa relación con las bases del partido y le hayan instado a acometer la tarea de reforzar las estructuras de la formación. Estas críticas a la dirección popular provienen sobre todo de la provincia de Barcelona y, en menor medida, de Girona.

En Lleida, la reacción del partido a las críticas de un sector que reivindicó el número uno del cartel para José Ignacio Llorens fue la destitución de cuatro miembros de la ejecutiva provincial. Hasta ayer, en Tarragona no se había alzado ninguna voz crítica en el PP, y en la reunión de la junta directiva provincial para analizar los resultados del 14-M, los dirigentes populares dieron su total apoyo a la gestión de Josep Piqué y a la campaña de los populares en las generales.