La Andalucía que se crece

Andalucía comienza una legislatura decisiva. Las elecciones del 14-M han deparado un escenario regional de estabilidad y un Gobierno "amigo" en Madrid para dar buena cuenta de nuestro principal reto para estos cuatro años, que no es otro que poner unos cimientos sólidos para la Segunda Modernización.

Al margen de otras consideraciones, el triunfo incontestable del PSOE de Andalucía en las elecciones autonómicas supone una apuesta rotunda por el proyecto estratégico de la Segunda Modernización. Ante este nuevo horizonte de cambio, tenemos que dar una respuesta eficaz y solvente a la encomienda principal que nos ha hecho el electorado. No podemos perder ni un minuto para situar a Andalucía entre las regiones más prósperas y avanzadas de nuestro entorno porque hemos recibido un mandato preciso en ese sentido. Tenemos los mimbres para hacerlo y, sobre todo, la energía de una sociedad andaluza que cree en sus posibilidades y que dispone de capacidad para sacar adelante este empeño. La gente, esa es hoy la gran fuerza de Andalucía.

En la legislatura pasada se pusieron los ejes sobre los que debe discurrir nuestro trabajo venidero. El documento Un proyecto, diez iniciativas y cien medidas para la Segunda Modernización marca el camino a seguir, un itinerario ilusionante en el que han participado cientos de miles de andaluces y que se convierte por partida doble en un proceso compartido.

En este nuevo tiempo político encontraremos el apoyo del Gobierno de la nación después de ocho años de acoso y discriminación. Su implicación sincera y leal con Andalucía supondrá el desbloqueo de proyectos vitales para nuestro futuro. Los metros de Sevilla, Málaga y Granada; la conexión por AVE entre las capitales; la solución al peaje de la A-4 o el apoyo a la investigación con células madre suponen un soplo de aire fresco, un nuevo periodo de colaboración que contrastará con la falta de afecto y de sensibilidad con nuestra tierra manifestada por los sucesivos gobiernos de Aznar.

Con José Luis Rodríguez Zapatero, como ocurrió antes con Felipe González, Andalucía tendrá el tratamiento que nos corresponde por justicia, ni más ni menos que lo que nos merecemos. No queremos privilegios, pero tampoco agravios. Por eso estamos convencidos del compromiso de hacer efectivo el pago de la deuda acumulada por el PP con Andalucía. Este nuevo marco de cooperación no supone una renuncia a nada: le reclamaremos al nuevo gobierno de Rodríguez Zapatero lo mismo que a los de Aznar. Por encima incluso de lo material, exigimos lealtad institucional.

Queremos hacer una legislatura basada en el diálogo y el consenso, para prestigiar la mayoría absoluta que nos ha otorgado la ciudadanía. Un clima político sin crispación y de acuerdo que ya se ha manifestado en la Mesa del Parlamento y que tiene que presidir toda la negociación de la reforma del Estatuto de Autonomía, que es el principal instrumento de autogobierno y que debe seguir siendo eficaz para que Andalucía continúe creciendo como hasta ahora.

Luis Pizarro es secretario de Organización del PSOE de Andalucía.