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La Junta dice ahora que hay que acabar con los embovedados de los arroyos como los de Málaga

Las 48 familias más afectadas por la riada en Rincón de la Victoria reciben hoy ayudas

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La consejera de Obras Públicas, Concepción Gutiérrez, anunció ayer que la época de los embovedamientos de los arroyos ha quedado atrás. Estas actuaciones son las que, según los expertos, han originado la riada en Rincón de la Victoria, donde hay 1.000 viviendas afectadas y 700 coches destrozados. El anuncio de la consejera, apoyado en una directiva comunitaria, choca con la política de la confederación Hidrográfica del Sur (CHS), que acaba de anunciar junto al alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, la construcción de un gran embovedamiento para el río Guadalmedina.

"Los pueblos han tendido históricamente a vivir junto a los ríos y a ir ganándoles espacio. Tanto, que se ha llegado a los embovedamientos, a cubrir con cemento los cauces de agua y eso es lo que origina los problemas de riadas", afirmó Gutiérrez en Rincón de la Victoria.

Aunque no quiso afirmar que la causa directa de las inundaciones han sido los embovedamientos de los arroyos de Rincón de la Victoria, Gutiérrez afirmó que "la nueva filosofía" de su departamento con los arroyos es "justo la contraria". "Se trata de integrar ramblas, ríos y la naturaleza en espacios públicos, pero sin estrechar su cauce", añadió. El alcalde de Rincón, José Domínguez, (PSOE) sí arremetió contra la CHS, que dice que no tiene ninguna responsabilidad en el desastre, por "proyectar, aprobar, contratar, pagar y recibir unos embovedamientos que contradicen la lógica".

"Lo saben los niños"

El alcalde puso un ejemplo gráfico: "Cualquier niño cuando pinta un río sabe que se ensancha cuando se acerca al mar. Lo saben los niños, pero no la confederación, que los diseña en forma de embudo a la espera que el agua, de forma inteligente y ordenada, sepa por dónde tiene que ir". Gutiérrez afirmó que, según la directiva comunitaria sobre aguas de 2001, traspuesta en España, no se deben embovedar cauces de arroyos. La consejera reconoció que la nueva filosofía no había llegado a muchos ayuntamientos y gestores de cuencas.

La prueba es la intención del Ayuntamiento de Málaga y de la CHS de recuperar el cauce del río Guadalmedina a su paso por Málaga para uso ciudadano. El plan contempla desviar gran parte del agua en un túnel para que no pase por Málaga con un coste de 120 millones de euros, según el alcalde.La consejera señaló en la ordenación de los ríos hay que intentar evitar el cemento, ya que "el río tiende a ir por donde ha ido siempre, la naturaleza es muy persistente". Junto a Gutiérrez, visitaron Rincón de la Victoria el consejero de Presidencia, Gaspar Zarrías, el de Agricultura, Paulino Plata, y el de Gobernación, Sergio Moreno. En una rueda de prensa que tuvo tintes propagandísticos (asistieron los vecinos más afectados), Zarrías anunció que la Junta de Andalucía entregará antes del próximo miércoles ayudas a las 250 familias más afectadas por las inundaciones del domingo. Mientras, el pueblo vuelve poco a poco a la normalidad. Aunque queda barro en las calles, y hay zonas sin agua ni luz.

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Zarrías aseguró que, "si la evaluación definitiva se queda pequeño", está previsto ampliar el crédito extraordinario inicialmente dispuesto por la Junta de un millón de euros para así "llegar donde sea posible". Las ayudas, de 2.000, 2.500 o 3.000 euros, según los daños sufridos se destinan a cubrir las necesidades más perentorias como compra de enseres para poder volver a habitar las casas. Las 48 familias más perjudicadas y con sus viviendas en peor estado serán las primeras en cobrar hoy una cantidad total que suma 150.000 euros.

Al finalizar la comparecencia, los consejeros, se acercaron a los afectados. "No me quedan ni los clavos en mi casa", le espetó una señora llorosa a Zarrías. El alcalde hizo también un llamamiento para salvar la temporada turística. "El pueblo empieza a recobrar la normalidad y queremos que los turistas lo sepan", afirmó.

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