El Gobierno regional construirá dos nuevas plantas de tratamiento de lodos para sustituir a la que cerrará

El Ayuntamiento de Madrid pidió el mes pasado al Gobierno regional que cerrase la planta de tratamiento de lodos que posee en Perales del Río (en los límites con Getafe) y que gestiona la empresa privada Sufisa. El Consistorio que preside Alberto Ruiz-Gallardón considera que los lodos de esta planta, y sus consiguientes olores, molestan a los vecinos de la zona. El Gobierno de Esperanza Aguirre anuncia ahora que construirá dos nuevas plantas de tratamiento, aunque no especifica dónde. Estas nuevas plantas harán la competencia a las que gestiona el Ayuntamiento de la capital y que, tras el cierre de la de Perales del Río, se quedarían en exclusiva con el negocio de la depuración de lodos en la región.

En una nota oficial que hizo pública ayer el Gobierno de Aguirre se detalla que el Ejecutivo regional pretende aprobar un Plan de Lodos de Depuradoras de Aguas Residuales para "proteger el medio ambiente". De este modo, los lodos procedentes de la depuración de aguas residuales serán usados como abono o como combustible.

Este plan, que estará concluido en 2006, apuesta por la prevención en la generación de residuos y por el fomento de su reutilización y reciclado a través de las infraestructuras necesarias.

El plan lo pondrá en marcha la Comunidad de Madrid y el Canal de Isabel II. Está dotado de 106 millones de euros, de los cuales el Canal gestionará el 43%. El Gobierno regional no ha hecho público qué empresa privada le acompañará en este proyecto.

En él se contempla una reducción de los lodos procedentes de la depuración de aguas residuales para evitar su acumulación en vertederos no controlados y la contaminación que eso conlleva. Con este proyecto se favorece la reutilización de estos lodos tanto en usos agrícolas, como abonos, e industriales, en forma de combustible principalmente. Con la ejecución de este plan se aprovechará el 80% de los residuos producidos.

Este proyecto contempla la ejecución de medidas como la construcción de dos plantas de compostaje cerradas, con la implantación y mejora de líneas de tratamiento de lodos; sendas plantas de secado térmico, y un depósito de eliminación de lodos.

Para desarrollarlo, los especialistas realizarán un muestreo de los suelos receptores de lodos. Con los resultados obtenidos, se creará un sistema estadístico y de gestión que se integre en el futuro Inventario Nacional de Residuos.

El Ayuntamiento de Madrid, única Administración que posee este tipo de plantas de tratamiento en la actualidad, había exigido al Canal un canon por depurar las aguas que llegaban a sus depuradoras. Si el Gobierno de Aguirre abre estas dos nuevas plantas, el Ejecutivo podría evitar, por lo menos en gran parte, el pago al Consistorio.