Un grupo de mujeres pide que la Iglesia no las discrimine

La lluvia torrencial que cayó ayer por la tarde en Barcelona no impidió que un centenar de personas, convocadas por el Colectivo de Mujeres en la Iglesia, se manifestaran ante la catedral de la capital catalana para reivindicar que la jerarquía eclesiástica "deje de marginar a las mujeres y les reconozca una mayor presencia en la liturgia, en la toma de decisiones y en el derecho a la palabra magisterial".

La Iglesia también es de las mujeres y Por un lenguaje paritario, rezaban algunas de las pancartas que portaban los manifestantes, en su gran mayoría mujeres. Otras pancartas reclamaban Más justicia y menos culpabilizaciones, así como Queremos una Iglesia de discípulos iguales y Si somos uno con Cristo, ¿quién nos divide?

Tras la protesta, los participantes en el acto se sumaron, en silencio, a la misa que se celebró en el interior de la catedral.

El Colectivo de Mujeres en la Iglesia realiza anualmente una protesta similar con el objetivo de que la jerarquía eclesiástica tome conciencia de que existe en la Iglesia un colectivo, el de las mujeres, que ve sus derechos "sistemáticamente olvidados". "Nuestras justas demandas no se escuchan, el diálogo no existe", recriminó ayer Josefa Amell, presidenta del colectivo.

Aunque esta organización está a favor del sacerdocio femenino, ésta no es una de sus principales reivindicaciones. "Pensamos que ahora no es el momento porque estamos inmersos en una crisis de sacerdocios", explica Amell. Sí figuran entre sus reclamaciones prioritarias, un cambio de actitud de la cúpula eclesiástica, algo "difícil", reconoce Amell, "dado que en ella sólo hay hombres". "Queremos que la Iglesia deje de culpabilizar a las mujeres de todos los males de la sociedad: si hay divorcios es a causa de las mujeres y si los ancianos se quedan solos también es por culpa de las mujeres", lamenta el Colectivo de Mujeres en la Iglesia.

La entidad pide que la Iglesia "dignifique a las mujeres y las valore, y que cuente con ellas".