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El PP incita en Reus a los vecinos a movilizarse contra una mezquita

El Ayuntamiento había cedido un solar en un polígono industrial

El portavoz del grupo municipal del Partido Popular en Reus (Baix Camp), Miguel Ángel López Mallol, instó el miércoles por la noche a un colectivo de vecinos a manifestarse contra la instalación de una mezquita en un polígono industrial cercano. "La solución es movilizarse", dijo el también secretario provincial del PP, que acudió a una asamblea en la que los vecinos mostraron su oposición a la construcción de este centro religioso.

El Ayuntamiento de Reus ha cedido un solar en un polígono industrial donde se construye un local que servirá de mezquita provisional a la comunidad musulmana -que reúne a unas 3.000 personas- mientras ésta no pueda financiarse un templo definitivo. El consistorio adoptó esta solución para zanjar una polémica de más de tres años, cuyo último episodio fueron unas movilizaciones vecinales que frustraron la apertura de una mezquita en en el barrio del Carrilet cuando la comunidad musulmana ya había alquilado un local y lo estaba reformando.

En este polígono industrial, uno de los más pequeños de la ciudad, las viviendas más cercanas están a 200 metros. Sin embargo, el colectivo vecinal de la urbanización Jardins de Reus, la más cercana a la zona, y varios propietarios de naves industriales se han declarado contrarios a la instalación de la mezquita, como ya hicieron cuando el Ayuntamiento apuntó la opción de este polígono, mucho antes de que se decidiera por el Carrilet.

El miércoles por la noche los vecinos convocaron una asamblea a la que asistieron miembros de CiU y del PP, en la oposición municipal, en la que arremetieron contra el equipo de gobierno, formado por el PSC, ERC e ICV-EUiA, por haberlos dejado al margen en la búsqueda de una solución. "Si se fueron del Carrilet, también pueden irse de aquí", dijo el portavoz popular durante la asamblea, aunque ayer matizó que en ningún momento quiso llamar a movilización ni incitar a oponerse a la mezquita.

El alcalde, Lluís Miquel Pérez (PSC), instó ayer a López Mallol a retirar sus palabras y señaló que la decisión de ubicar la mezquita en este polígono es "irrevocable". Pérez lanzó un mensaje de moderación dada la "delicada" situación generada tras los atentados de Madrid. En la asamblea se oyeron proclamas racistas y alusiones al terrorismo. Los vecinos han convocado una manifestación en forma de cacerolada frente a las puertas del Ayuntamiento para el próximo lunes.

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