La Zona Franca de Cádiz cede a una firma privada los contratos del principal cliente de Quality Food

La Zona Franca de Cádiz, dirigida por Miguel Osuna (PP), delegado especial del Estado nombrado por el Ministerio de Hacienda, cederá a una empresa externa todos los contratos que Quality Food (una sociedad dedicada a servicios de alimentación y catering de la que es accionista mayoritario) tiene con el Ministerio de Defensa. Estos contratos representan el 60% de los ingresos y facturación de Quality Food. Antiguos directivos de la empresa y personas todavía vinculadas a la compañía alertaron ayer de que esta operación puede causar "el desmantelamiento" de la empresa.

Los antiguos directivos de Quality Food, con Manuel García Gallardo, ex presidente, a la cabeza, expresaron ayer su preocupación por el futuro de la sociedad y de los 475 trabajadores que la forma tras el desvío de sus principales contratos. Miguel Osuna, que dirige el consorcio que gestiona el recinto fiscal gaditano (presidido por la alcaldesa de Cádiz, Téofila Martínez), refutó esta denuncia y garantizó la continuidad de Quality Food porque, según explicó, gracias a esta cesión "se corregirá una situación irregular".

Quality Food es la empresa adjudicataria, mediante concurso público, de varios contratos con el Ministerio de Defensa para surtir de platos de comida fresca a miles de militares en cuarteles de toda España. Esta sociedad ingresa 600.000 euros mensuales por este servicio. La Zona Franca cederá este contrato a Unión Castellana de Alimentación S.A. (UCALSA), una empresa con dilatada experiencia en proveer de alimentos a tropas españolas destacadas en zonas de conflictos. En la actualidad, sirve junto con otra empresa, llamada Tecnove, unos 4.800 kilogramos de alimentos a los 1.600 soldados destacados en Irak.

Esta operación es interpretada de manera dispar, según de quien proceda la lectura. El delegado de la Zona Franca, Miguel Osuna, que será sustituido en el plazo de un mes por un dirigente del PSOE nombrado por el nuevo ministro de Hacienda, asegura que esta cesión corregirá una situación "irregular" y no merma los ingresos y el volumen de trabajo de Quality.

Según explicó ayer a este periódico, Quality Food estaba suministrando platos preparados y pasteurizados a los militares cuando el pliego de condiciones exige platos frescos preparados in situ. Ante la imposibilidad de asumir el incremento de los costes que supondría enviar a cocineros y personal especializado a los lugares de suministro, Quality Food de este contrato a Ucalsa, que se encargará de preparar estos platos en las mismas poblaciones de los cuarteles contratados. A cambio, Ucalsa adquiere el compromiso de compensar a Quality comprándole los 600.000 euros de platos pasteurizados que prepara mensualmente. Ucalsa revenderá luego esta producción a otras compañías, como Iberia o El Corte Inglés. Para Miguel Osuna, con esta operación, Quality se asegura seguir ingresando el dinero del contrato original con Defensa y "corrige" una deficiencia en la prestación del servicio. Asimismo, sostiene que se abre una nueva línea de negocio con Ucalsa para un futuro.

Contrato a un ex edil

Sin embargo, los antiguos directivos sostienen que esta cesión es la "muerte anticipada" de Quality Food al desprenderse de su principal cliente, como es Defensa. Advierten además de que el número de platos que Ucalsa comprará a la empresa gaditana será "muy inferior" a los que actualmente distribuyen a Defensa. Asimismo, denuncian que en el paquete del acuerdo se acuerda una indemnización de un millón de euros en caso de rescisión del acuerdo. Así las cosas, los nuevos gestores que lleguen a la empresa, se encontrarán con estos acuerdos blindados. "El blindaje está expresamente prohibido en las empresas publicas", recuerda García Gallardo, quien advierte además de que Quality y Ucalsa han acordado también que esta última contrate con un salario de 120.000 euros anuales a Francisco Villarreal, ex concejal del PP de Cádiz, como responsable comercial de la nueva línea de negocio que obtiene Ucalsa.