Montilla advierte a CiU de que "Cataluña y su Gobierno no son moneda de cambio"

Sonriente y distendido, pero contundente, el primer secretario del PSC, José Montilla, lanzó ayer un primer aviso a navegantes, singularmente a Convergència i Unió (CiU). La nueva mayoría socialista "no excluye absolutamente a nadie", pero "Cataluña y su Gobierno no son moneda de cambio", dijo. En la rueda de prensa posterior a la comisión ejecutiva del PSC, Montilla subrayó que la holgada victoria de los socialistas en Cataluña ha convertido al PSC en el pal de paller de la política catalana", al tiempo decisivo y clave para la victoria del PSOE.

Los socialistas catalanes están orgullosos de los resultados obtenidos, pues han logrado 21 diputados y han batido en números absolutos de votantes (unos 2.000 más) su récord de 1982, cuando obtuvieron 1.575.260 sufragios.

Montilla subrayó ayer, tras la reunión de la ejecutiva del PSC, los buenos resultados cosechados por los socialistas no sólo en Cataluña, sino también en el País Vasco, Andalucía, Galicia y Aragón, frente a otras comunidades con una progresión inferior, como Castilla-La Mancha y Extremadura, gobernadas por José Bono y Juan Carlos Rodríguez Ibarra, respectivamente, informa Efe. "Seremos decisivos para construir otra España, porque otra España es posible", apuntó el primer secretario del PSC. Los buenos resultados permiten al PSC albergar esperanzas de tener presencia en el futuro Consejo de Ministros que presida Rodríguez Zapatero. Pero de momento nadie quiere hablar de eso. "Ahora la prioridad no son los cargos, sino administrar el proceso de transición" que se abre con la salida del Partido Popular del Ejecutivo central.

En el terreno de los pactos, Montilla avaló la estrategia de Zapatero de gobernar en minoría con apoyos parlamentarios y aseguró que "no es viable un Gobierno alternativo" al del PSOE. En este sentido, recordó que el PP gobernó en minoría en 1996 "con menos escaños" de los que ahora tiene el partido socialista.

De momento la primera oferta, efectuada por CiU, ha sido observada con reticencia por los socialistas catalanes, que creen que la federación nacionalista de Jordi Pujol quiere con ello sacar réditos para abordar su posible entrada en el Gobierno de Cataluña. Respecto al deseo expresado por el presidente de la Generalitat y del PSC, Pasqual Maragall, de que estos apoyos se centren en los socios con los que gobierna en Cataluña, Esquerra Republicana (ERC) e Iniciativa per Catalunya Verds-Esquerra Unida i Alternativa (ICV-EUiA), Montilla se limitó a comentar: "Estableceremos contactos con todas las formaciones políticas para ver su predisposición".