Fomento da los primeros pasos para cerrar la M-50 por el norte y construir la M-60

El Ministerio de Fomento quiere completar los anillos de circunvalación de Madrid. Por ello, ha sacado a concurso los estudios informativos para terminar la M-50 y construir una nueva autovía de circunvalación, la M-60. Pero los problemas medioambientales a los que se enfrentan estas obras son enormes. Tanto la M-50 como la M-60 deberán atravesar el monte de El Pardo, una de las zonas naturales más importantes de la Comunidad de Madrid. La M-60, además, cruzará varios parques regionales, incluido el del Manzanares, que fue declarado por la Unesco reserva mundial de la biosfera.

El Boletín Oficial del Estado publicó ayer la licitación para la redacción del estudio informativo de cierre de la M-50 en el tramo comprendido entre la A-1 (carretera de Burgos) y la A-6 (autopista de A Coruña). La longitud estimada de esta obra es de unos 32 kilómetros, según los cálculos oficiales. Llevar a cabo estos trabajos tendría un coste aproximado de 900 millones de euros

Fomento recuerda que la A-1 y la A-6 sólo están unidas actualmente por la M-40, una vía que se puso en servicio en diciembre de 1996. Desde entonces, el incremento del número de vehículos que circulan por ella "puede calificarse como excepcional, derivado fundamentalmente de los importantes desarrollos urbanísticos y del crecimiento general de la economía, uno de cuyos efectos es el aumento de la movilidad por carretera tanto de personas como de mercancías", dice el ministerio.

Estos hechos, según Fomento, tienen "especial incidencia en la M-40 por la doble finalidad que cumple. Por un lado, sirve de comunicación entre ejes radiales, evitando la entrada en Madrid del tráfico de paso y, por otro, facilita la movilidad entre distintas áreas de la capital. Puede señalarse como dato significativo que el tráfico en la zona de los túneles de El Pardo se ha incrementado un 40% entre los años 1999 y 2002".

Según el ministerio, cuando entren en funcionamiento todas las autovías de peaje que están en construcción, la actual M-50 -que no está terminada- no tendrá capacidad suficiente para absorber todo este tráfico. Por eso, la M-40 será "la única vía de circunvalación metropolitana entre la A-1 y la A-6". Según Fomento, la única solución a este aumento del tráfico es cerrar el anillo de la M-50, que actuará de alternativa por el norte a la M-40. Los datos oficiales señalan que en 2009 utilizarán este nuevo tramo unos 33.000 vehículos.

Pero el monte de El Pardo, posiblemente el mejor y más valioso bosque mediterráneo del centro de la Península, se interpone en los planes del ministerio. Fomento asegura en su nota que en el estudio que ha sacado a licitación "se realizarán los análisis de tráfico y ambientales que procedan, los cuales se extenderán a toda el área de influencia de la actuación, debiendo tener en cuenta el conjunto de inversiones en infraestructuras viarias tanto estatales como autonómicas previstas en la zona, y el planeamiento urbanístico existente en los municipios afectados". Asimismo, el ministerio realizará una evaluación de impacto ambiental que se someterá a la preceptiva declaración de impacto.

Pero los planes ministeriales no acaban aquí. El Boletín Oficial del Estado también publica la licitación para el estudio informativo de la M-60. El presupuesto de estos trabajos es de dos millones de euros, mientras que la construcción de la autovía se estima en unos 1.500 millones. La longitud de este nuevo cinturón será de unos 170 kilómetros.

Movilidad entre municipios

La M-60, en caso de ser construida, transcurriría concéntrica a la M-50, y pasaría por municipios como Torrelodones, Hoyo de Manzanares, Colmenar Viejo, Fuente del Fresno, Alcalá, Morata, Valdemoro, Arroyomolinos, Brunete o Villanueva del Pardillo. Su trazado atravesaría todos los parques regionales de la Comunidad, excepto el de Peñalara, que queda muy al norte.

Según Fomento, esta nueva autovía servirá para "descargar la M-40 y la M-50 fundamentalmente del tráfico que, sin vocación de entrada en Madrid, tiene su origen en distintos ejes radiales, y colaborará en el desarrollo general de las zonas por las que discurra, facilitando la movilidad entre ellas". De llevarse a cabo, este tráfico podría pasar por mitad de los parques regionales, alguno de los cuales será atravesado en varias ocasiones por la autovía prevista.