La oposición cree que Sanz "cierra en falso" la crisis

El presidente navarro, Miguel Sanz, dio ayer por cerrada la primera crisis de gobierno que ha sufrido en las tres legislaturas que lleva al frente del Ejecutivo foral. Los dos nuevos consejeros -José Ignacio Palacios, de UPN, en Bienestar Social y el independiente Álvaro Miranda, que le releva en Obras Públicas- tomaron posesión de sus cargos apenas 48 horas después de que la independiente Reyes Berruezo dejase el Gabinete. Palacios dijo entender el abandono de Berruezo ante lo que calificó de campaña de "mentiras y calumnias" de la oposición.

Sanz ha optado por cerrar con la mayor rapidez posible una crisis que le ha salpicado en plena precampaña. Ha cambiado de cartera a uno de sus hombres de confianza (Palacios) y ha elevado a consejero al director general del departamento que aquél dejaba. La oposición considera que la crisis se ha cerrado en falso y critica con dureza que un consejero como Palacios, reprobado por el Parlamento navarro por irregularidades en la concesión de licencias de FM, se vaya a hacer cargo de un área tan sensible como Bienestar Social.

En 1999, una comisión parlamentaria de investigación concluyó que Palacios resolvió un concurso de licencias de radio con "arbitrariedad e iniquidad" en una decisión "dictada por el capricho y el prejuicio" y en contra "de la razón y la ley". CDN, ahora socio de gobierno de UPN, pidió la dimisión inmediata de Palacios, que nunca fue exigida por Sanz.

Palacios podría verse afectado por el resultado de tres procesos judiciales en curso sobre la concesión en 1998 de las licencias, cuya resolución se espera en breve.Es el único consejero que Sanz ha mantenido desde su llegada al poder.

La oposición le acusa de ser "extremadamente conservador y autoritario" y sostiene que la solución dada por Sanz a la crisis evidencia la falta de alternativas de UPN, al tener que optar por un consejero "bajo sospecha permanente", en palabras de José Miguel Nuin, portavoz de IU. Palacios responde que ha permanecido ocho años gestionando obra pública y ahora se va "con las manos limpias" tras cumplir el objetivo de "devolver al departamento el prestigio que el PSOE echó por el suelo" durante la presidencia de Gabriel Urralburu.

Reyes Berruezo ha pedido ya su reincoporación como docente en la UPNA.