Iberia redujo su resultado neto un 8,7% en 2003 por la guerra de precios del sector aéreo

La guerra de precios entre las compañías aéreas ha pesado en los resultados de Iberia, que redujo su beneficio neto un 8,7%, hasta 145,8 millones de euros. La compañía española no pudo rentabilizar el haber tenido la tasa más alta de ocupación de asientos de su historia (75%). El presidente de la empresa, Fernando Conte, reconoció ayer la sobreoferta en el sector y la guerra de precios que se ha desencadenado en un año difícil, con la guerra de Irak y la neumonía asiática como elementos más distorsionantes en un negocio que todavía sufría reminiscencias del 11-S, la fecha más fatídica para el sector. A pesar de todo, el segundo semestre del año Iberia enderezó en parte el rumbo.

Iberia obtuvo unos ingresos de explotación de 4.619,3 millones de euros (caída del 1,7%), los gastos fueron de 4.458,6 millones de euros (subida del 0,2%). El resultado de explotación ascendió a 160,7 millones de euros, con una caída del 35,5%. Un dato que refleja claramente la "guerra de precios" de que habló Conte es que los ingresos por pasajero transportado cayeron el 7,3% en el pasado año.

Conte no quiso hacer previsiones económicas para el presente año, pero se atrevió a señalar que "es racional pensar que se producirán concentraciones de compañías aéreas y que Iberia se halla para ello con una gran fortaleza financiera, a pesar de las barreras regulatorias y políticas que existen en Europa". Conte no pudo precisar el modelo de desarrollo en la práctica que se adoptará "en el segundo semestre de este año" en la alianza que se mantiene con British Airways, aunque sí precisó que " no será una fusión". Asimismo, criticó el modelo adoptado por Air France y KLM por "no ser eficiente".

Iberia, que a lo largo del pasado año se revalorizó en Bolsa, el 62,9%, registró ayer una caída del 3,51% tras conocerse los resultados.