Hospital rico, hospital pobre.
Unas urgencias al borde del colapso y la falta de confort de las habitaciones en la zona norte son las principales quejas de los pacientes que acuden al Servicio de Atención al Cliente del Hospital Clínico de Madrid. Estas áreas esperan una rehabilitación desde hace años. El centro es un lugar contradictorio, donde convive a un mismo tiempo una superficie rehabilitada con habitaciones individuales y otra de muy distinto signo, donde las habitaciones cuentan hasta cinco camas y cada 12 pacientes dispone de un cuarto de baño.
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