Recuenco dice que no será cómplice de la política laboral del Consell

El líder de UGT-PV, Rafael Recuenco, explicó ayer que no será "cómplice" de la política "nefasta" que hace que día tras día "caigan" trabajadores por la precariedad. La comisión nacional respaldó ayer por unanimidad el rechazo de la ejecutiva a firmar el plan contra las muertes en el trabajo. Recuenco habló de falta de contenidos. CC OO salió en defensa del acuerdo y el Consell criticó la actitud del sindicato.

El secretario general de UGT-PV defendió que el plan de choque firmado el viernes entre el Consell, la patronal autonómica Cierval y CC OO-PV "no aborda" los problemas de la siniestralidad laboral y hace responsable a los trabajadores de una situación que tiene como únicos responsables a los empresarios y al Gobierno. Recuenco criticó que el Consell "no ataja" la subcontratación, "el problema fundamental" y no acepta la figura de los delegados territoriales ni aumenta la plantilla de la Inspección de Trabajo. El responsable sindical, además, recordó que se siguen sin contabilizar los accidentados en carretera. El sindicato, en este sentido, explicó que según la Dirección General de Tráfico en 2002 murieron 33 conductores profesionales mientras trabajaban. El Ministerio de Trabajo, por el contrario, sitúa esta cifra en 18 muertes. El secretario de Acción Sindical de UGT-PV, Carlos Calero, defendió que "no se va a solucionar este problema" atendiendo sólo a los accidentes in itinere (de camino o vuelta al trabajo) y que el hecho de que la mitad de los accidentes de tráfico no se consideren de trabajo hace que éstos no se investiguen.

En relación con las medidas que contiene el plan para frenar las muertes en la construcción, Calero entiende que la única solución es que los delegados de prevención puedan entrar en los centros de trabajo y que se refuerce la Inspección de Trabajo.

UGT-PV explicó que participó en todas las reuniones "públicas" convocadas para elaborar el plan, sin reuniones bilaterales como sí hizo CC OO-PV, según criticaron. También considera que el plan firmado es igual de "insuficiente" que el que se presentó en otoño. Estas críticas desataron la reacción del Consell y de CC OO-PV.

La Consejería de Economía, por un lado, confirmó en un comunicado la participación de UGT-PV en la preparación del plan. Por eso, la consejería considera que UGT-PV "queda en evidencia cuando dice que el Gobierno valenciano ha firmado un plan cerrado". Economía atribuyó la posición de UGT-PV a "una falta de iniciativas e ideas para atajar el fenómeno de la siniestralidad" y aseguró, por ejemplo, que la actuación inspectora se ha incrementado en los últimos años, con más efectivos. En sus palabras, las argumentaciones del sindicato intentan "justificar su falta de compromiso" en este tema.

CC OO-PV emitió un comunicado en el que defendía el plan de choque como "un buen instrumento para la prevención de riesgos". El sindicato insiste en que el plan suscrito el pasado viernes "ofrece soluciones" a la siniestralidad laboral y supone "un avance razonable" por sus cinco líneas de actuación "concretas y evaluables".