Pujol insta a CiU a que huya del "espectáculo" político del tripartito

El ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol instó ayer a Convergència i Unió (CiU) a mantenerse en "la centralidad política" y a huir del "espectáculo" que, en su opinión, protagoniza el Gobierno tripartito catalán. Los partidos catalanes han empezado a calentar los motores de cara a la campaña electoral de las generales, que en Cataluña, a tenor de la jornada de ayer, vendrá marcada por la reciente crisis del Ejecutivo de la Generalitat.

El PSOE advierte a Carod de que sería un grave error convertir el 14-M en un plebiscito

Pujol, que participó en Lleida en la primera jornada de la Escuela de Invierno de CiU, reivindicó el concepto de centralidad política como un patrimonio exclusivo de la federación nacionalista y como un ejemplo de oposición constructiva "en momentos delicados". Pujol calificó la situación actual de máximo riesgo para Cataluña, para el nacionalismo, para los partidos políticos y para las instituciones. Y, en clara referencia a las "contradicciones" y actitudes del tripartito, instó a la plana mayor de la federación a no dejarse arrastrar por el "espectáculo que están dando algunos partidos" ni por la "confrontación sistemática".

El dirigente nacionalista también reivindicó como un patrimonio a conservar "la actitud constructiva" de CiU, una fuerza política de la que dijo que, durante los 23 años que ha gobernado la Generalitat, "ha estado siempre al servicio de Cataluña" y que también quiere mantener esa actitud después de las elecciones del 14 de marzo. "Estas elecciones", afirmó, "son muy importantes y nos jugamos la continuidad de ese papel de centralidad que siempre hemos desempeñado", tanto en la política catalana como española.

En medio de una situación política que se está caracterizando por tener "la rabia a flor de piel", Pujol apeló ante los cuadros electos del partido al orgullo y al voto emocional basado en "el sentido común" y mostró su convencimiento de que "más allá de las llamaradas" el futuro de Cataluña "sigue pasando por la centralidad y por la voluntad de construcción del país".

Por este motivo, añadió, CiU no debe moverse de esta posición y estar siempre preparada para dar respuesta a la situación que puede darse cuando los partidos del tripartito hayan hecho "la excursión por los caminos de la fantasía", "sus contradicciones hayan explotado" y vuelvan a la realidad.

Pujol no quiso ahondar en la crisis en el Gobierno de la Generalitat. "Si tuviera que opinar de todas las cosas que han pasado estos días tendría que hacerlo en términos muy críticos, más críticos que nadie por la proximidad y conocimiento que tengo de las cosas, pero no tengo ningún interés en hurgar en las heridas", arguyó.

La gestión del tripartito catalán y la airada salida del Gobierno del republicano Josep Lluís Carod Rovira emergieron en los discursos que los dirigentes socialistas catalanes pronunciaron ayer en Barcelona en la presentación oficial de la candidatura a las legislativas de marzo. Pero lo hicieron en forma de críticas a los republicanos y subrayando las ventajas de la gestión de la izquierda. José Montilla y Carme Chacón, que ocupan los dos primeros puestos de la lista por Barcelona, arremetieron contra Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y su voluntad de convertir los comicios del 14-M en un plebiscito a Carod Rovira. "Esto puede servir para desahogarnos un día, pero luego nos arrepentiremos durante cuatro años", afirmó la portavoz del PSOE.

Ambos dirigentes presentaron al PSC como el único "voto útil" en Cataluña capaz de contribuir a la "derrota" del PP. "Nos presentamos ante la sociedad catalana no para castigar al PP, sino para ganarle", manifestó Montilla.

Por su parte, Carme Chacón, en una entrevista a la agencia Efe, aseguró que el Gobierno catalán supone "una esperanza para España" porque, dijo, "en menos de 100 días, Pasqual Maragall ha sido capaz de ilusionar y profundizar en el desarrollo social". "Los ciudadanos catalanes ya están viendo las ventajas del tripartito", añadió.

Desde ERC , su secretario general Josep Lluís Carod, en un acto de entrega de carnés a nuevos militantes, se ensañó contra el PP, formación a la que definió como la nueva "Inquisición política del siglo XXI". Carod insistió en su apuesta por el diálogo político y en alusión a su entrevista con la cúpula de ETA, afirmó: "Somos culpables, pero a mucha honra. Nosotros defendemos un modelo democrático y pacífico".