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La Bienal de Flamenco muestra su "faceta solidaria" con dos talleres dedicados a presos y discapacitados

Dos iniciativas pretenden que el flamenco ayude a distintos sectores a integrarse en la sociedad. Se trata de dos talleres promovidos por la Bienal de Flamenco de Sevilla en colaboración con Caja San Fernando. Uno de ellos va destinado a internos de la cárcel de Sevilla; el otro busca mejorar la vida de los discapacitados.

El director de la Bienal, Manuel Copete, presentó ayer los dos talleres en el Pabellón Real de Sevilla. El taller El Compás entre dos Mundos, que impartirá la asociación Danza Mobile a partir del 9 de febrero, concluirá el 26 de marzo. El curso de flamenco en el centro penitenciario de Sevilla también se iniciará el 9 de febrero y concluirá el 19 de marzo.

Copete señaló que la Bienal, que cumple su 25º aniversario, es algo más que un festival que se celebra cada dos años. "La Bienal es también un compromiso continuo con el flamenco y una oficina permanente. La Bienal sigue ahora con la faceta solidaria, aunque la palabra sea un poco excesiva. Queremos hacer una llamada de atención sobre determinados mundos", comentó Copete.

"El flamenco no permanece ajeno al mundo de los discapacitados ni al mundo de los presos", agregó. El director de la Bienal recordó el vínculo de las letras flamencas con "los cautivos y los presos". "En muchos de los rincones del flamenco están las quejas de la gente que está marginada", indicó Copete

El director del curso de flamenco en el centro penitenciario de Sevilla, Alfonso de Miguel, explicó que este arte "en la prisión es la música de la cárcel". "Tras el flamenco está el cautivo, el lamento... El flamenco es alegría y es tristeza. El flamenco es la música más querida en la cárcel", dijo De Miguel.

Buena acogida

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El director del taller recordó que los artistas que actúan en la cárcel se sienten tan bien acogidos por los internos que suelen volver. "En la cárcel hay mucha gente que sabe cantar, tocar la guitarra, bailar... Hay incluso artistas flamencos en la prisión. No diré su nombre por respetar su privacidad. Hay muchos camaroneros", agregó, en referencia a los seguidores de Camarón de la Isla. El curso va destinado a que muchos de los internos que aman, cantan y bailan flamenco conozcan la historia de este arte.

Por su parte, la asociación Danza Mobile presenta el otro taller, que tiene como objetivo "favorecer la integración" de alumnos discapacitados y gitanos. "Se formará un grupo que estará compuesto por personas con discapacidad intelectual y por gitanos, profesores y alumnos, músicos y bailarines, con el objetivo de trabajar conjuntamente en el campo de la danza y la música", explica la asociación. "En el lenguaje del arte nos podemos encontrar", aseveró Esmeralda Valderrama, que dirigirá el taller.

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